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La Confederación Hidrográfica del Cantábrico está llevando a cabo el mantenimiento de varios ríos cántabros, con el objeto de evitar la formación de taponamientos y favorecer la capacidad de desagüe en los cauces. Esta actuación, que se ha enmarcado en las cuencas fluviales de Aguanaz, Pas y Pámanes y parte de una inversión global de unos 135.000 euros, contempla su conservación y mejora para que, cuando lleguen las lluvias, se minimice el impacto de las crecidas.
Eso sí, en nota de prensa, Confederación aseguró este viernes que su trabajo se efectúa a través de la empresa pública Tragsa, dentro del Programa de mantenimiento y conservación de cauces que desarrolla la entidad, pero matizó que «fuera de las zonas urbanas», en las que -según puso de manifiesto- las labores de conservación y mantenimiento de cauces son competencia de los ayuntamientos.
En los últimos años, las temporadas lluviosas han dejado escenas desoladoras en la región, precisamente por el desbordamiento de diversos ríos que terminaron causando daños y afectando a centenares de familias. Una situación que despertó la crítica social, dirigida hacia los organismos responsables de la limpieza de ríos. Hacia quién es el responsable de qué y por qué, con independencia de lo anterior, se permite que la maleza se acumule en los ríos.
Uno de los municipios cántabros más afectados fue Piélagos, que a finales de 2021 sufrió con especial dureza el desbordamiento del Pas, afectando con mayor virulencia a las localidades de Oruña y Vioño, en donde se vieron perjudicadas fincas privadas, garajes, viviendas y negocios. Fue una situación que recordó a las inundaciones de finales de los ochenta y que desembocó en la puesta en marcha de una medida de urgencia: la declaración del municipio como zona catastrófica.
Precisamente la Confederación ha incluido esta cuenca fluvial en su programa de trabajo, gracias a una inversión inicial de 55.000 euros, que permitirá atajar al Pas en la localidad de Zurita, donde aquellas inundaciones provocaron una fuerte afección en la coronación de una escollera realizada años atrás.
El tramo afectado sobre el que se trabajará tiene una longitud de unos 30 metros y una altura de 6 metros. De manera complementaria se plantea la recuperación del brazo derecho del cauce, que se encuentra actualmente ocupado por depósitos de acarreos, respetando la isla existente en el centro del cauce.
Los trabajos cuentan con un presupuesto inicial de 55.000 euros y están dirigidos a la defensa de la margen con el traslado de acarreos para provocar el desvío del cauce principal por el brazo derecho habilitado, la reconstrucción de la escollera dañada y la plantación de vegetación de ribera en su parte superior. Previamente al comienzo de las labores se ha realizado el rescate y posterior liberación de fauna íctica mediante pesca eléctrica.
En el término municipal de Corvera de Toranzo, a consecuencia de estas crecidas, se encuentran numerosos depósitos de vegetación muerta en el interior del cauce lo que incrementa el riesgo de obstrucción en futuras avenidas. Las actuaciones con el objeto de reducir el riesgo de taponamientos y mejorar la capacidad de desagüe del cauce del río Pas cuentan con un presupuesto inicial de 9.500 euros.
La actuación se lleva a cabo de manera paralela en otro rincón de Cantabria donde se han detectado numerosos obstáculos por caída de árboles y arrastres de corriente. Es el caso del río Aguanaz, en el entorno del barrio de San Antonio, en el municipio de Entrambasaguas. Allí, a consecuencia de estas situaciones, se ha visto aumentado el riesgo de taponamientos y «mermado la capacidad de desagüe» del río y sus arroyos tributarios del municipio y Bocarrío, según ha explicado Confederación.
Estas actuaciones en Entrambasaguas cuentan con un presupuesto inicial de 55.000 euros y están dirigidas a la extracción de estos depósitos de material vegetal muerto. Además, los trabajos se llevarán a cabo de manera manual, con el apoyo puntual maquinaria para el auxilio mecánico de los restos y se ejecutará la retirada de residuos antrópicos hallados en los cauces.
Según explicó Confederación, en el término municipal de Liérganes, entre las localidades de Pámanes y El Condado, con motivo del seguimiento de actuaciones llevadas a cabo para la mejora de la conectividad longitudinal de los cauces, se ha observado que en el río de Pámanes se ha producido la caída de varios árboles de gran porte que han sido arrastrados por la corriente. Del mismo modo se han detectado en las márgenes del río otros árboles, de similares características y con posibilidad de caída, los cuales deben ser podados o talados en función de sus características para evitar su caída al cauce.
Las actuaciones cuentan con un presupuesto inicial de 16.000 euros. Los trabajos se efectúan manualmente y con apoyo puntual de maquinaria tanto para las labores de apeo y poda, como para la extracción de la vegetación del cauce.
Estos trabajos se efectúan a través de la empresa pública Tragsa dentro del Programa de mantenimiento y conservación de cauces que desarrolla la Confederación Hidrográfica del Cantábrico fuera de las zonas urbanas, en las que las labores de conservación y mantenimiento de cauces son competencia de los ayuntamientos.
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