Fomento inicia la redacción del proyecto para restaurar el puente de Oruña

El plan que diseñe elEjecutivo servirá para diseccionar los pormenores de una actuación que se basa más en la forma que en el fondo, «ya que recogerá cómo realizar los acabados y las reparaciones necesarias en esta pasarela histórica que une las dos localidades», concretaron a su vez desde Fomento. Una vez redactado, el documento volverá a llamar a las puertas de Cultura, encargada de dar el visto bueno definitivo e iniciar la licitación –esta última le corresponderá, también, a los técnicos de la Consejería de Fomento–.

El puente, del siglo XVI, ha sido una de las principales preocupaciones del equipo de gobierno popular desde que se viera afectado por las inundaciones de 2021. «Incluso antes de este episodio –señaló ayer el regidor– el deterioro de este bien patrimonial ya era apreciable a simple vista».La riada «se llevó por delante un tajamar de una de las pilas de la plataforma», lo que terminó por confirmar lo delicado de la situación. La Consejería de Obras Públicas procedió entonces a cortar el tráfico de vehículos y de peatones hasta que los técnicos confirmaron que no había peligro de que se viniera abajo. Fue cuestión de un par de días. A continuación, realizó las pertinentes labores de emergencia para devolver cada pieza a su lugar, «pero la actuación quedó incompleta», insistió ayer Caramés, de manera que aunque se aseguró su estabilidad, continuó deteriorándose desde el punto de vista estético. Y eso es precisamente lo que se va a arreglar con la actuación que prevé ejecutar la Consejería. ¿Cuándo? Caramés no ofreció ayer una fecha concreta. Tampoco una cantidad económica, aunque aseguró que «contamos con el compromiso de la presidenta del Gobierno de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, quien dijo que se arreglaría costase lo que costase». No hay que olvidar que se trata de un bien catalogado que lleva años perdiendo la lucidez de los elementos que configuran su esencia. «Se han caído varias piedras y el firme de la carretera se encuentra en muy malas condiciones, lo que supone un peligro para los viandantes sobre todo». Precisamente por su alto valor histórico, desde el Gobierno de Cantabria prefieren ir con pies de plomo «y elaborarán el proyecto a ejecutar teniendo muy en cuenta los requisitos de la Consejería de Cultura». Por la pasarela circulan tanto vehículos como peatones, si bien es cierto que el regidor reconoce que «lo atraviesan más personas que coches». Tradicionalmente se le conoce como el Puente Viejo de Oruña, aunque una vez finalice la remodelación prevista, parecerá un poco más nuevo.