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El puente viejo que une Oruña y Arce, que fue cerrado este martes al tránsito de vehículos y peatones por la Policía Local de Piélagos ... a raíz de nuevos desprendimientos de piedras, reabrió ayer la circulación y el paso de coches y viandantes se recuperó con normalidad. Transcurridas las 13.00 horas de este miércoles, el cierre policial fue retirado por el Ayuntamiento, después de que los trabajos preliminares llevados a cabo para corroborar que la estructura no corre peligro arrojaran un resultado favorable. El que esperaba la Consejería de Obras Públicas del Gobierno de Cantabria.
Ayer, el titular del departamento, José Luis Gochicoa, volvió a Oruña para hacer un seguimiento de los trabajos de altura que estaban realizando los especialistas. No obstante, el informe preliminar basado en las mediciones que el dron recogió el día anterior ya hacía apuntar que el puente podría reabrir a lo largo del día. «Todo parece corroborar que no existe ningún problema», aseguraba el propio consejero antes de que se reanudara la circulación para vehículos y peatones en el puente.
Después, ya con los resultados de ese informe preliminar, el que ha aportado el ingeniero encargado de analizar los primeros datos obtenidos con el dron, se reafirmaba. «El puente no ha sufrido variaciones y su estabilidad no corre peligro». Por eso, y una vez llevados a cabo los trabajos de la jornada de ayer por parte de los especialistas de altura, se procedió a la reapertura del paso al tráfico rodado –salvo camiones y vehículos de gran tonelaje, que tienen prohibido circular–.
El Diario Montañés tuvo acceso al informe preliminar realizado por el ingeniero en base a los datos extraídos del dron, en el que se recoge que «como conclusión, no considero necesario adoptar ninguna medida de seguridad adicional». El experto también explica, al margen de esto, que «se pueden realizar pequeños rellenos con mortero para disimular grietas y roturas».
Además, el ingeniero ha constatado en el informe remitido ayer a la Consejería que «el estado de estas roturas es prácticamente el mismo» al que reflejaban los datos que se obtuvieron a comienzos de enero –antes de los últimos desprendimientos de piedras–, aunque quizá «se ha prolongado algo hacia la izquierda a lo largo de la fisura natural, como consecuencia de las heladas».
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Tanto este martes como ayer, miércoles, el titular de Obras Públicas se trasladó a Oruña para conocer de primera mano en qué condiciones se encontraba el puente, tras adoptar la decisión, por parte del Ayuntamiento de Piélagos, de acordonar la estructura. El primer día, Gochicoa ya avanzaba que se daría paso a las labores de medición, unas con un dron y otras con especialistas en altura, a fin de auscultar el arco y corroborar que no estaba comprometida su seguridad.
Ahora, una vez reanudada la circulación sobre el puente, la Consejería de Obras Públicas se centrará en agilizar con la Dirección General de Patrimonio el proyecto de rehabilitación de la estructura, recalcando que estas labores tienen que ser fruto de la colaboración institucional, debido a que se trata de una joya patrimonial protegida –catalogada como Bien de Interés Cultural (BIC) desde 1984–. Por eso, recalcó , de momento, lo que se ha hecho sobre el puente por parte de su departamento es garantizar que no cayera. Acometer su asentamiento estructural por la vía de emergencia. «Si no hubiéramos intervenido, se habría caído el puente», enfatizó.
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