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La Junta vecinal de Liencres sale al rescate. Después de años de debate sobre cómo solucionar los graves problemas de aparcamiento en las zonas de los arenales de Piélagos -un asunto que este verano ha provocado conversaciones entre el Gobierno y el Ayuntamiento-, por fin ... se toma una decisión, aunque sea circunscrita a la pequeña playa de La Arnía. Allí, la citada junta vecinal cederá unos terrenos en los que saldrán entre 35 y 40 plazas de parking, un proyecto que se empezará a redactar en breve y que implicará a las dos administraciones (municipio y Ejecutivo).
El Ayuntamiento también quiere soluciones para los accesos a las playas de Valdearenas y Canallave, ambas en Liencres, según se ha puesto de manifiesto este jueves en el último encuentro entre las partes y que ha concluido con la habitual declaración de intenciones: las actuaciones que se emprendan contarán con la colaboración de la consejería de Desarrollo Rural que dirige Guillermo Blanco -que tiene que valorar que estén dentro de lo permitido por el Plan de Ordenación del Parque Natural- y también de la Demarcación de Costas en Cantabria, competente en todo lo que se refiere al dominio público marítimo-terrestre.
Estas playas están sometidas cada verano a la invasión de vehículos, sobre todo los fines de semana. Hace años que la asistencia de bañistas se disparó y hace años que se busca solución, sin resultados. Con un agravante: esta parte del litoral está integrado en el parque natural de las Dunas de Liencres y Costa Quebrada. Esta vez, y es una más, tanto la consejería de Desarrollo Rural como la Demarcación de Costas de Cantabria y el Consistorio y la junta vecinal han afirmado que «trabajarán coordinadamente en actuaciones para la mejora en el uso público en el Parque Natural con el fin de evitar el uso indebido de determinadas zonas de este espacio natural protegido en las épocas de mayor afluencia turística», según un comunicado oficial difundido por el Gobierno.
Las Administraciones son conscientes de que la falta de aparcamiento «no solo genera impactos indeseables» en un parque protegido por ley, sino que también «perjudica la experiencia de los visitantes y genera incomodidades a la población local».
Guillermo Blanco ha reiterado el llamamiento que hizo recientemente a la responsabilidad ciudadana «a la hora de cuidar el entorno natural» respetando las zonas de parking. Al tiempo, ha insistido en que no se puede aparcar en lugares que pudieran dificultar las labores de acceso de los equipos de emergencias, como ambulancias o efectivos de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado.
En la reunión de hoy han participado el director general de Biodiversidad, Medio Ambiente y Cambio Climático, Antonio Lucio; la alcaldesa de Piélagos, Verónica Samperio; el presidente de la Junta Vecinal de Liencres, José Manuel Portilla; el teniente alcalde del Ayuntamiento, Alfredo Rodríguez; el jefe de la Demarcación de Costas en Cantabria, José Antonio Osorio, y la directora del Parque Natural, Raquel Sánchez.
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