El puente viejo que une Oruña y Arce durará «otros mil años más»

El puente viejo ha sido objeto de una obra de calado, realizada con motivo del deterioro que había sufrido la infraestructura a raíz de los daños sufridos durante varios temporales de lluvia, especialmente el de noviembre de 2021, cuando la fuerza del Pas arrancó el tajamar principal que protegía la estructura.

De ahí que el Gobierno de Cantabria, a través de la Consejería de Obras Públicas, declarara la intervención de emergencia y destinara recursos para llevar a cabo las obras para garantizar la conservación de un puente que, prácticamente, se caía. Si bien la apertura del puente era ya inminente, como apuntó el titular del área a este periódico, el Ejecutivo cántabro ha podido inaugurar el puente antes de lo previsto.

Hoy, el presidente, Miguel Ángel Revilla, destacó que el puente viejo es una «seña de identidad» de Piélagos y de Cantabria, ya que millones de peregrinos lo han utilizado a lo largo de los siglos y lo seguirán utilizando a partir de ahora a diario para recorrer los Caminos de Santiago y Lebaniego.

Por su parte, el consejero de Obras Públicas, Ordenación del Territorio y Urbanismo, ha explicado que la obra ha tenido gran complejidad partiendo de una situación difícil y de «riesgo evidente» de caída tras las riadas.

Esta infraestructura fue construida en 1585, durante el reinado de Felipe II, y declarada Bien de Interés Cultural (BIC) el 20 de diciembre de 1984.

Gochicoa ha destacado que, gracias al saber los responsables de la ingeniería, Miguel Ángel Rodriguez y Eduardo Suengas, ha sido posible salvar «un elemento fundamental de la historia de la ingeniería de Cantabria», y ha resaltado también el esfuerzo de los arqueólogos y de los técnicos de la Dirección General de Patrimonio Cultural

Tras el refuerzo de la estructura, también se ha procedido a la semipeatonalización del puente, restringiendo el tráfico a vehículos ligeros que podrán transitar en dirección única de Puente Arce a Oruña, para lo cual se ha llevado a cabo una importante labor de señalización.

Además, el consejero ha anunciado la construcción de una rotonda en Puente Arce para dar más alternativas al tráfico rodado.

En el acto celebrado hoy han estado presentes, entre otras autoridades, la directora general de Patrimonio Cultural, Zoraida Hijosa; el director general de Obras Públicas, Manuel del Jesus; la alcaldesa de Piélagos, Verónica Samperio; el teniente alcalde, Alfredo Rodríguez, además de otros miembros de la Corporación Municipal, empresas constructoras y vecinos de la zona.

Como recordó hoy el Gobierno de Cantabria, la crecida del río Pas produjo prácticamente la desaparición del tajamar de la pila una, mientras que la dos, situada a la izquierda en el sentido de las aguas del río Pas, también se vio afectada por el arrastre y socavamiento del material de relleno que le rodeaba. Como consecuencia, fue necesario cerrar el paso y declarar de emergencia los trabajos necesarios para su reparación y la restitución del entorno a la situación previa a la inundación.

En líneas generales se ha procedido a la estabilización del arco dos, para evitar desprendimientos de piedras sobre los trabajadores en posteriores labores bajo el puente como tensados o sellados de espuma en las grietas del paramento. También se ha consolidado la cimentación en profundidad de la pila una, mediante la ejecución de 12 micropilotes de 220 milímetros de diámetro, armados con camisa de acero de 139 milímetros de diámetro, los cuales han alcanzado profundidades medias de 27 metros, empotrándose tres de ellos, al menos, en el lecho rocoso del cauce río Pas. Mientras tanto, se acometía la consolidación de la cimentación en profundidad de la pila uno, se iniciaron las operaciones de consolidación de la pila dos.

Una vez asegurados el arco dos y las pilas sobre las que descansa la una y la dos, se procedió a las labores de reconstrucción del tajamar y que han incluido la recuperación de los restos del antiguo tamajar, así como piedras de otros desprendimientos anteriores al actual.

La práctica totalidad de las piedras utilizadas en la reconstrucción del nuevo tajamar se han extraído del propio cauce del río Pas, bajo el puente viejo, caídas como consecuencia de anteriores daños sufridos por esta infraestructura viaria.