Una treintena de vecinos paran unas obras en Piélagos y se enfrentan a una sanción

Rosa Mari lo cuenta con cierta guasa después de que uno de los agentes la pidiera su identificación. Sonríe amablemente, mientras relata lo que, a estas alturas de la vida, jamás se imaginó estar contando. «El policía me ha cogido el número de mi casa, porque no llevaba el DNI encima», dice la mujer, siendo consciente de que, en un pueblo como Vioño, saber dónde una vive es lo mismo que estar identificada.

La movilización de los vecinos tiene su razón de ser en su disconformidad con las obras que está ejecutando el Ayuntamiento en la carretera y con que, según explican, no les haya informado, pese a que el proyecto está colgado en la página web. Se trata del 'Proyecto de construcción: nueva acera entre el barrio El Arrabal y Salcedo de Vioño'.

En él, según textualmente recoge la memoria, se explica que «teniendo en cuenta el importante impacto ambiental que supondría la ejecución del desmonte o muros de contención necesarios para poder encajar la sección tipo requerida en el PGOU, además del complejo proceso constructivo y el coste económico del mismo, se opta por plantear una calzada con dirección única en este trayecto».

Esto es, desde el inicio de la actuación, hasta el camino de acceso al cementerio, se permitirá «únicamente» el tráfico de vehículos con sentido hacia el barrio de San Vicente, «prohibiéndose la circulación en sentido Salcedo».

Esa carretera es la misma por la que, cuenta Rosa Mari, ella iba a la escuela de pequeña; la misma por la que accede al cementerio; y la que utilizan todos los vecinos como única vía de escape cuando llegan las inundaciones. Y ahora es la misma carretera en la que «me he sentido coaccionado y ofendido», explica otro vecino que asegura que la Policía Local les invitó a irse y que de no hacerlo serían sancionados. «'Si no os vais os podéis dar por denunciados todos', nos dijeron».

«No queremos una carretera de dirección única y esto no es lo que habíamos pedido», señala la alcaldesa pedánea, Inmaculada Araunabeña, que también acudió ayer a la movilización que acabó con la maquinaria interrumpida y una sanción ya en camino. Y es que, según explica, prácticamente se toparon con las obras y «nos hemos sentido desoídos como vecinos». «Tampoco nos han dado explicaciones y la alcaldesa no nos ha querido recibir de manera urgente». De ahí que, explica la pedánea, la intención de este frente vecinal haya sido simplemente que la regidora les atendiera. «En cuanto llegaron los vecinos y trataron de parar la hormigonera, la escribí para informarla y para que se personara. Pero no lo hizo y luego apareció la Policía».

Según fuentes municipales consultadas por El Diario Montañés, la Policía Local recibió la «orden» de personarse en el lugar e «identificar» a todos los vecinos que se encontraban en el lugar. Todos. «Unas 25 o 30 personas». «Se les solicitó que abandonaran la carretera, pero comunicaron verbalmente que no se iban a marchar». Por eso, los agentes procedieron a solicitar el DNI para tramitar a la correspondiente sanción. «Serán los superiores u oficiales los que establezcan qué tipo de sanción se interpone», explicaron a este periódico fuentes policiales.

Pos su parte, la regidora, Verónica Samperio, aseguró que el proyecto lleva «un año» en tramitación y que las obras no han empezado ayer, sino «hace meses». También puso de manifiesto que el proyecto, como todos, se cuelgan en la página web municipal y, por tanto, son de libre acceso para todos los vecinos. Y, que, además, según estaba programado antes, este jueves habrá una reunión informativa en el local municipal de Salcedo para informar de los detalles técnicos del proyecto a los vecinos.