La conservera que toma prestado el nombre de Revilla gana el premio a la Mejor Anchoa 2018

De Diego ha explicado que la empresa lleva el nombre del presidente del Gobierno cántabro con su autorización y con la condición de destinar a la Cocina Económica de Santander el 2% de las ventas y ha asegurado que Revilla es «el mejor embajador» de la anchoa del Cantábrico.

Tras recoger el premio, que le ha entregado el alcalde de Santoña, Sergio Abascal, Jaime de Diego ha afirmado que es «un orgullo» recibir este reconocimiento, para el que han hecho un «gran esfuerzo y trabajo», y ha puesto en valor que la fábrica cuenta con un equipo «genial» de trabajadores que logra sacar un producto «mejor todavía».

Dependiendo de la temporada y del trabajo que haya, esta «joven y pequeña» conservera cuenta con entre ocho y diez trabajadores y, con reconocimientos como el recibido hoy, aspira a seguir trabajando, a sacar nuevos productos y a ofrecer a la gente más variantes de la anchoa.

Un ejemplo de este trabajo es la puesta a la venta este año de la anchoa con mantequilla, según ha relatado De Diego, «como realmente se hacía antaño», a lo que ha añadido que con ella se retoma una tradición.

Es la segunda vez que la empresa M.A. Revilla se presenta al concurso de la cata para elegir la mejor anchoa del año, un certamen que tanto en 2017 como en 2016 ganó Conservas Ana María.

En la edición de 2018 han participado 15 conserveras, frente a las 18 de 2017, de las que 7 pasaron a la fase final, después de la preliminar, ambas celebradas el pasado domingo.

Como ha resaltado el canciller de la Cofradía de la Anchoa de Cantabria y director de la cata, Pedro Benavent, durante el acto para entregar el premio, el ganador ha sacado «tan sólo» un punto al segundo clasificado, lo que, en su opinión, pone de manifiesto la «excelente calidad» del producto que, un año más, ha participado en este concurso.

La entrega del premio a la mejor anchoa de 2018, la realización de una acuarela de grandes dimensiones reproduciendo un bocarte, a cargo de la artista local Mamen Restegui, y un nuevo taller del proceso de elaboración de la anchoa han sido los últimos actos de la edición de este año de la Feria de la Anchoa y la Conserva de Cantabria que hoy cierra sus puertas tras cinco días de intensa actividad.

Para el alcalde de Santoña el primer balance de la edición de este año es «muy positivo», con una feria «larga pero intensa» y prácticamente «llena a rebosar» todos los días y un volumen de ventas «mejor» que el del año pasado.

Sergio Abascal ha agradecido la acogida que ha tenido entre los visitantes al municipio la celebración de la feria, con un tiempo que, al final, «no ha sido tan duro y tan malo como se esperaba» y que «ha respetado» los días más importantes, el sábado y hoy, martes, y «muy contento» a la espera de conocer en los próximos días el balance definitivo.

«Ha sido una muy buena feria en cuanto a número de visitantes, cifras de ventas y negocio y también muy importante y emocionante por los eventos que ha acogido, como el homenaje a las mujeres trabajadoras del sector, el concurso de pinchos y la cata de la mejor anchoa», ha relatado.

El alcalde de Santoña ha avanzado que ya comienza el trabajo para la feria del año que viene, que será «especial» dado que cumplirá veinte años desde que empezara a organizarse en 1999, por lo que «habrá que celebrarlo de la mejor manera posible».

Además, ha confiado en que las costeras «sigan siendo buenas», no sólo la del bocarte, sino también las del chicharro, verdel y bonito, ha dicho, para que «podamos disfrutar de los productos del mar y de nuestra industria pesquera y conservera, que es lo más importante en Santoña».