La elección del cartel del Carnaval de Santoña ya está en manos del público

La autoría de los trabajos es un secreto y así se debe mantener hasta el final del proceso. En caso contrario, se descalificará automáticamente. El creador que esté detrás del cartel más apoyado se llevará un premio de 1.000 euros y el honor de promocionar este festejo, que se celebrará del 14 de febrero al 15 de marzo.

A partir de hoy y hasta el miércoles 4 de diciembre, a excepción del fin de semana, todo aquel que quiera puede acercarse a la sede de la Oficina de Turismo de la villa -de 10.00 a 15.00 horas-, en cuya cristalera estarán expuestas las tres obras, y votar por la que más le gusta.

Un jurado integrado por la Comisión de Festejos y otras personas relacionadas con el Carnaval de Santoña, se reunió ayer para realizar una primera criba entre los catorce trabajos que han concurrido al concurso. Su labor fue seleccionar las tres obras que consideraron más artísticas y llamativas para promocionar el festejo. Entre los aspectos que valoraron figura la inclusión de algún elemento característico de la villa, así como que llame la atención, genere visibilidad y deseo de acudir al evento.

Los tres carteles finalistas, atendiendo a las bases de la convocatoria que, por cierto, prohibían el uso de la inteligencia artificial, se caracterizan por su marcado acento marinero. Se da la coincidencia, que dos de ellos están protagonizados por máscaras, mientras que el restante está dominado por un caballo, poco visto hasta ahora en las propuestas.

Esta obra requiere de una gran atención para captar sus detalles. Y es que la figura del equino esconde lugares emblemáticos del municipio. Las pezuñas representan el monumento a Juan de la Cosa, el cuello es la torre del Faro del Caballo, su lomo, conformado por vegetación, hace alusión al monte Buciero y sus acantilados, y una red hace las veces de cola. Sobre el animal, decorado con un gorro festivo, va una sirena de plastilina. La escena, ambientada en la playa, es contemplada por un besugo, el símbolo del carnaval.

Otra de las propuestas está constituida por una colorida máscara repleta de elementos marinero: besugos, caballitos de mar, anclas, redes, conchas y hasta un pulpo. Tampoco faltan enclaves míticos de la villa como el Faro del Caballo o las plazas de San Antonio y del Peralvillo. El tercer diseño, el más realista, es el rostro de una mujer cubierto con una máscara decorada con escenas locales pintadas con acuarela como el Fuerte de San Carlos, la Virgen del Puerto o el mirador del muelle.