Los lavaderos de Arnuero recobran su esplendor
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Patrimonio. ·
El Ayuntamiento tiene un proyecto para inventariar y declarar Bien de Interés Local su veintena de pilas y fuentes de cara a proceder a su rehabilitación y organizar rutasHubo un tiempo en el que el lavar la ropa no se hacía de puertas para dentro del hogar, sino que era una tarea pública en torno a los lavaderos ubicados en las calles de los pueblos. Cuando aún no existía el agua corriente, las ... mujeres acudían a estos pequeños espacios a limpiar las prendas, a la vez que socializaban e intercambiaban historias. Estas estructuras forman parte de la memoria colectiva. Y son muchos los municipios que aún conservan estos elementos, a menudo, deteriorados por el implacable transcurrir del tiempo. Su falta de uso les ha relegado al olvido y al abandono. Pero en el Ayuntamiento de Arnuero se han propuesto rescatarlos con un proyecto para rehabilitar la veintena de lavaderos y fuentes existentes en sus cuatro pueblos. El objetivo es devolverlos su esplendor original con la mirada puesta en convertirlos en un recurso turístico y etnográfico que enriquezca la oferta, ya por si nutrida, del Ecoparque de Trasmiera.
El alcalde, José Manuel Igual, detalla que la iniciativa contempla inventariar las veinte fuentes y lavaderos y sus zonas de influencia para su posterior declaración como Bien de Interés Local (BIL). «La idea es presentar la propuesta en un pleno en los primeros meses de 2024», adelanta. Paralelamente, el Consistorio va a llevar a cabo la rehabilitación de este patrimonio local que, en algunos casos, está bastante descuidado. «Es un plan a cinco años, pero ya hemos empezado a restaurar algunas de estas estructuras», concreta el regidor.
En Castillo, vuelven a brillar el lavadero y la fuente de El Escajal, en la subida al Portillo. Al igual que la pila de San Juan, situada junto a la ermita en este mismo pueblo. Con un emplazamiento único, en plenos acantilados, muestran su mejor cara de nuevo el lavadero y la fuente de Corporales, en Isla; mientras que en Arnuero, en el barrio Los Mártires, se ha rescatado el lavadero y la fuente de la ría de Castellanos. Lo mismo se hizo hace varios años con estas dos instalaciones emplazadas en Soano, en el entorno de las marismas de Joyel y Vitoria, a las que se dotó, además, de un pequeño espacio público.
De cara al verano, ya se ha previsto recuperar la fuente de la plaza de Soano, con un proyecto que se completa con un paseo hasta este núcleo central y la ejecución de plazas de aparcamientos. Y así se seguirá hasta recuperar la veintena de estructuras en un horizonte de cinco años.
Los trabajos de acondicionamiento corren a cargo de los obreros de la brigada municipal. «Están realizando una labor ímproba de recuperación de nuestras historia y tradiciones», enfatiza el alcalde. «Es cierto que no tienen la relevancia de las iglesias, del casco histórico o del molino de mareas, pero los lavaderos constituyen una parte espectacular de nuestro patrimonio, tanto histórico como etnográfico, ya que durante muchos años fueron espacios de convivencia en los pueblos, a los que se acudía a lavar la ropa», aduce.
Una vez restauradas, tanto las fuentes como los lavaderos contarán con agua, aunque, por precaución, se indicará con un letrero que es «agua no conectada a la red», ya que hay veces que es potable y otras no. «Pero todas estarán en funcionamiento».
Esta iniciativa persigue a medio plazo impulsar, de la mano de los técnicos de Turismo del Ecoparque de Trasmiera, una ruta guiada. «Es un proyecto similar al que ya tenemos en marcha con las diez ermitas del municipio, que se van a declarar BIL en el pleno de este mes de diciembre, y las vamos a poner en valor organizando visitas. Con las fuente y los lavaderos queremos desarrollar una actuación parecida».
De esta forma, explica Igual, se pretende que los turistas se distribuyan por distintos emplazamientos del municipio, principalmente en los meses de mayor afluencia de julio y agosto». Y es que el regidor reconoce que Isla, y concretamente la zona de Quejo, en determinados días de verano está sobresaturada, por lo que «queremos ofrecer a los visitantes planes alternativos en otros puntos del municipio, que son igual de bonitos e interesantes. Tenemos muchos más recursos que el sol y la playa». Un firme propósito que se va materializar a través de las acciones previstas con el Plan de Sostenibilidad Turística concedido a Arnuero, con un montante de 3,4 millones de euros.
Gracias a la labor de la brigada municipal, el Ayuntamiento también ha recuperado y reubicado recientemente la Cruz de Viules, en Castillo. Esta se conservaba en un alto rodeada de un eucaliptal e inaccesible para los vecinos. Ahora, se ha reubicado en una parcela de la Junta Vecinal de Castillo, alcanzable para todos. Tras su acondicionamiento, el Consistorio quiere recuperar el próximo mayo una antigua tradición ante dicha cruz consistente en la bendición de los campos. Una muestra más de la intensa labor del Ayuntamiento de Arnuero por retomar y conservar tradiciones que se han perdido y que durante siglos formaron parte de la idiosincrasia local.
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