Un nuevo puente para salvar la ría de Rada

«Teníamos clara la necesidad de un puente y la rehabilitación no era la solución», explicó el consejero en el transcurso de la presentación del anteproyecto a los alcaldes cuyo nexo de unión actual es un viejo, enfermo y estrecho puente sobre la ría de Rada, en la CA-268. Tras barajar hasta cinco alternativas, Obras Públicas ha optado por una de ellas que resuelve, además, el problema del cruce existente con una rotonda. A la par, la elección del anteproyecto también ha tenido en cuenta los condicionantes ambientales de este espacio que cuenta con diferentes administraciones implicadas como Costas o Confederación.

Tras la presentación del proyecto, se va a enviar a información pública el mismo con la publicación en el Boletín Oficial de Cantabria, dado que al tratarse de una infraestructura situada en un espacio natural protegido requiere informes y, entre ellos, la declaración de impacto ambiental favorable. Precisamente, el aspecto ambiental es uno de los argumentos que más han pesado a la hora de evaluar las alternativas y, en este sentido, Gochicoa se mostró optimista con la opción seleccionada porque se libera espacio y se mejoran los flujos ambientales, con un puente «moderno, que mejora la calzada, el tablero y el arcén, dando respuesta a lo que busca la población de Voto y Bárcena de Cicero». Por ello, el consejero confía en que sean solamente «meses» para concluir con el proyecto constructivo y poder licitar las obras antes de que finalice la legislatura. «Esto sería un éxito, vamos intentarlo porque es nuestro objetivo y esperamos que vaya todo bien», resumió.

Durante la reunión, ambos alcaldes mostraron su satisfacción por iniciar una obra «muy necesaria» porque es la puerta de entrada para Voto y mejorará la seguridad vial de manera «muy importante» en los municipios colindantes.

En líneas generales, el proyecto incluye un trazado que discurre paralelo al actual puente, a una distancia de 15 o 20 metros, lo que permitirá el paso durante su construcción.

La estructura elegida es una losa de hormigón postesado compuesta por cuatro vanos, dos laterales de 21 metros y dos centrales de 27 metros. Esta intervención conlleva la modificación del trazado de la carretera autonómica secundaria CA-268, Adal Treto-Bádames, de unos 300 metros, y de su intersección con la carretera autonómica secundaria CA-258, Ampuero-Carasa, dentro de los municipios de Bárcena de Cicero y Voto.