Okuda dará color a los silos ganaderos de Ajo

La intervención, para la que se recoge una partida de 20.000 euros en el presupuesto municipal, transformará la imagen de seis silos de ganado que se encuentran abandonados desde hace décadas. Las estructuras cilíndricas de gris cemento serán el lienzo sobre el que Okuda de rienda suelta a su creatividad. El Consistorio le concederá «total libertad» a la hora de plasmar su propuesta que se caracterizará por su singular estilo, tan colorista como surrealista.

La actuación, explicó la alcaldesa de Bareyo, Ángela Ruiz, se materializará el próximo verano. Los silos que se van a rescatar del olvido para convertirse en obras de arte se ubican a lo largo de la carretera de acceso al núcleo urbano de Ajo, cuyo desvío se toma en el pueblo de Bareyo y llega hasta el barrio El Convento. Se trata de un vial, enmarcado entre inmensos campos verdes, que bordea la ría de Ajo. «Los silos no están escondidos; se ubican en el mismo borde de la carretera por lo que son fácilmente visibles, tanto si se va en coche como si se transita por la senda peatonal que hay por la zona». Las estructuras se erigen por parejas por lo que se intervendrá en tres puntos diferentes. El primer par de silos se encuentra nada más acceder al vial y un kilómetro después te topas con los otro cuatro separados por escasos metros.

El Ayuntamiento ya ha contactado con los dueños de estos viejas construcciones ganaderas para formalizar un documento en el que autorizan desinteresadamente su uso por un plazo de unos diez años. El Consistorio asumirá las tareas de mantenimiento y conservación que sean precisas en este tiempo. Antes del trabajo artístico, se procederá a limpiar el exterior de las estructuras y se retirará, igualmente, la vegetación que cubre algunos de los cilindros.

El objetivo de este proyecto es dar una segunda vida a esta arquitectura rural en desuso, que se despojará de su carácter anodino para llenarse de vida y color. El propósito es que se conviertan en un nuevo foco de atracción turística en el municipio, que vendrá a completar la intervención realizada el pasado verano en el faro de Ajo. «Así como hay ayuntamientos que apuestan por instalar esculturas en distintos puntos de sus ciudades, el interés del equipo de gobierno es que Ajo se convierta en una especie de museo al aire libre de grafitis, referente en España», señaló Ruiz.

Para ello, se pretende crear una ruta de arte urbano y, «aprovechando el enorme tirón del faro de Ajo, que ha recibido ya cerca de 90.000 visitas, queremos volver a contar con Okuda, de talla internacional, para atraer un turismo de calidad a nuestro municipio». A este respecto, la regidora pone en valor que las obras que realiza este artista alcanzan una difusión mundial y «la prueba - dice -es que medios internacionales como la revista 'National Geographic' de Viajes se hicieron eco del faro de Ajo como lugar para visitar a raíz de la pintura de Okuda».

En un principio, la intención del Ayuntamiento de Bareyo era convocar un concurso público de ideas para transformar los silos. Sin embargo, para esta primera fase han querido apostar «por un artista consagrado que nos dé notoriedad». No obstante, la iniciativa señaló la alcaldesa, continuará en sucesivos años y se contará con otros creadores para pintar aquellos silos del municipio que estén próximos a carreteras y zonas de paseo.

Para Okuda, transformar un silo no será una experiencia nueva. En 2019, participó en Ciudad Real en el proyecto Titanes en el que pintó, con la ayuda de personas con discapacidad, una enorme estructura que antaño sirvió para almacenar cereal.

Y a la espera de que se haga realidad esta nueva intervención, continúan la visitas al faro de Ajo que abre sus puertas los fines de semana -con una media de 1500 visitantes - y en Semana Santa se podrá acceder a diario. El Ayuntamiento, recientemente, ha renovado las vallas de madera que delimitan la senda de la finca, ya que se habían deteriorado al apoyarse los turista para tomarse fotos y además, se va actuar en el camino peatonal para facilitar el acceso a personas con movilidad reducida y sillas de bebé.