Okuda iniciará su intervención en el faro de Ajo la próxima semana

Autoridad Portuaria, Gobierno de Cantabria y Ayuntamiento de Bareyo no han dado marcha atrás en esta propuesta, que nació con vocación de permanente, pero, finalmente, tendrá un carácter temporal de cuatro años, con la posibilidad de prorrogarse otros cuatro más si las partes están de acuerdo. Pasado este tiempo, el cuerpo del faro mudará de nuevo al color blanco. Es la única concesión que ha hecho Puertos a raíz de todo el revuelo que se ha levantado con el fin de encontrar una iniciativa que «sea válida» para todas las sensibilidades. La de partidarios y la de detractores.

Desde comienzos de esta semana, vecinos y veraneantes se han percatado de que hay cierto movimiento en el interior de la finca. Varias palas excavadoras trabajan ya en el entorno del faro con el objetivo de prepararlo todo para la llegada del artista más internacional de la región. Fuentes del Gobierno de Cantabria han confirmado a este periódico que Okuda comenzará a pintar la torre la próxima semana, si bien no se puede concretar el día exacto ya que todo dependerá de la meteorología. Al tratarse de una actuación al aire libre, el tiempo marcará la evolución de esta obra que, en principio, estará concluida en un plazo de quince días.

Okuda plasmará su composición, con una paleta de 72 colores, a la vista de visitantes y curiosos pues ayer mismo la finca del faro de Ajo abrió sus puertas al público. Lo habitual es que lo hubiera hecho a comienzos de verano, pero este año el Ayuntamiento de Bareyo se ha visto obligado a retrasar la apertura al no disponer de los contratados a través del programa de Corporaciones Locales. «Se ha incorporado una persona en el ámbito de turismo que desde ayer se encarga de controlar el acceso de visitantes, a los que se dispensa gel hidroalcohólico y se toma la temperatura», explicó el alcalde, José de la Hoz.

La presencia de turistas no obstaculizará el desarrollo de la intervención ya que «caminarán por las sendas peatonales delimitadas», mientras Okuda deja su reconocible huella en la estructura de 63 metros de altura. El regidor es un firme defensor de esta iniciativa que tiene claro que será un «gran atractivo turístico» para el municipio y para Cantabria en general, y aventura que «en dos años será visitada por media España».

La actuación, que se financia a tras bandas (Puertos, Gobierno regional y Consistorio), supone una inversión de 75.000 euros. De este presupuesto, «40.000 euros corresponden a Okuda y una buena parte son para materiales», aclaró el presidente de Puertos, Jaime González. El resto del montante se destinará a la ejecución de trabajos en otras edificaciones de la finca, como son la rehabilitación de la casa del farero y el garaje.

A la vista de que el proyecto ya ha echado a andar, el PP de Bareyo dirigió ayer un escrito al alcalde en el que solicita la paralización de las obras en el faro «hasta que se les otorgue la correspondiente licencia municipal y se restablezca la legalidad urbanística en el mismo». El portavoz popular, Gabino Martínez, asegura que hasta la fecha no hay ningún convenio entre el Ayuntamiento y la Autoridad Portuaria que haya sido aprobado en pleno, y «no tenemos constancia de que se haya solicitado licencia de obras, emitido informe técnico, ni se haya otorgado la perceptiva licencia municipal sujeta a las normas urbanísticas para poder desarrollar algún tipo de obra sobre el faro».