Borrar
El vídeo refleja cómo estaba la campa del cabo Quintrés antes de empezar el festival y cómo acabó. Antonio 'Sane'

La resaca del Delirium

El cabo Quintres ha quedado cubierto por una cantidad incalculable de basura tras los tres días de un festival que ha cosechado un descontento general: el de los asistentes, que reclaman el importe de sus entradas, y el de vecinos, que se echan las manos a la cabeza

Mariña Álvarez

Ajo (Bareyo)

Lunes, 14 de agosto 2017, 19:42

El Cabo Quintres de Ajo es un paraje virgen de pastos al borde del mar, lugar de paso de aves migratorias, donde la ganadería tradicional sigue campando a sus anchas, sin asfalto, sin urbanizar, tan bonito y rural como pocos enclaves costeros de Cantabria. ... A la organización del Delirium Festival debió de parecerle perfecto para celebrar un macroconcierto de música electrónica. El Ayuntamiento de Bareyo concedió el permiso pertinente. Por delante, tres días con un cartel con mucho gancho, bien nutrido de estrellas internacionales... Este domingo -casi- todo terminó. Mientras los operarios intentan retirar la ingente cantidad de basura que generó el festival, los asistentes siguen recogiendo firmas para pedir que se les devuelva el dinero por los problemas organizativos del evento y vecinos de la zona continúan echándose las manos a la cabeza al comprobar cómo ha quedado todo.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

eldiariomontanes La resaca del Delirium