El rodaje del programa Masterchef en Santoña levanta gran expectación

Decenas de vecinos se acercaron hasta el improvisado 'centro de operaciones' teniendo que conformarse con contemplar la grabación tras unas vallas colocadas a gran distancia para proteger de los curiosos y de las cámaras de sus móviles tanto a los concursantes como el contenido del programa que se emitirá, previsiblemente, para verano. De hecho, su 'desembarco' en Santoña para rodar esta prueba de exteriores se ha gestionado con un total secretismo, condición indispensable de la productora para que no se filtren detalles antes de tiempo.

Desde la lejanía, se pudo ver a los tres miembros del jurado, Samantha Vallejo Nágera, Jordi Cruz y Pepe Rodríguez con la ausencia, en esta ocasión, de la presentadora Eva González, que se encuentra de baja por su reciente maternidad. Bajo unas carpas colocadas en el lateral del Centro de Interpretación que mira hacia al puerto de recreo, los concursantes, divididos en dos grupos, rojo y azul, cocinaron los platos requeridos por el jurado y en los que la anchoa pudo estar entre los ingredientes que utilizaron para la elaboración del menú.

La grabación del programa de Masterchef ha recalado en el municipio gracias a la Cofradía de la Anchoa de Cantabria. Su patrón mayor, Tino Sampedro, explica que se pusieron en contacto con la productora, Shine Iberia, porque están interesados en nombrar 'Cofrade Mayor' a uno de los tres cocineros que conforman el jurado. De momento, desde la Cofradía quieren mantener la intriga y no desvelar quién volverá al municipio el sábado, 28 de abril, para recibir esta distinción en los actos del Gran Cabildo.

El caso es que la productora aceptó la petición pero, a cambio, le propuso su ayuda para grabar uno de los capítulos de la sexta edición en Santoña. Sampedro reconoce que «me dio un ataque de nervios» cuando me lo dijeron, pero «enseguida me puse en marcha porque es muy importante para la promoción de la villa». Cuenta que lo primero que hizo fue ir a hablar tanto con el consejero de Turismo, Francisco Martín, como con el alcalde de Santoña, Sergio Abascal, para recabar colaboración económica siempre dentro de un presupuesto limitado. «Tras varias reuniones con ellos dos, se llegó al acuerdo de que lo apoyaban para hacerlo y el Día del Aldeano nos confirmó la productora definitivamente que venían a grabar un capítulo de Masterchef».

Todo se ha gestionado con un secretismo absoluto, tal y como les requirieron desde Madrid ya que, de lo contrario, podría haberse suspendido la grabación del programa en la villa. Con mucho trabajo y cautela, la Cofradía ha conseguido que no se desvelara nada. «No se lo dije ni a los compañeros cofrades. Lo saben solo desde hace diez días», justifica Sampedro.

El equipo del programa, conformado por más de 70 personas, llegó a Santoña en la jornada del martes. Por la tarde, grabaron cómo es el proceso de elaboración de la anchoa en una fábrica y el miércoles rodaron en el puerto la prueba de cocinar un menú. Los cofrades estuvieron, en todo momento, al lado del equipo facilitándoles lo que necesitaran para la grabación, ya fueran platos, sillas, mesas o cualquier otra cosa. «Está siendo un día intenso pero merece la pena».

El buen tiempo, hizo sol pero un gélido frío, permitió grabar en el puerto, con los permisos del Gobierno regional, aunque Sampedro reconoce que tenían la alternativa de una gran nave para en el caso de que la lluvia hubiera estropeado los planes.

Una vez que los concursantes elaboraron los platos, éstos fueron degustados en el interior del Centro de Interpretación donde se dispuso un pequeño comedor para unas cincuenta personas. Entre los que participaron en esa degustación estuvieron los propios cofrades, autoridades locales y gentes del gremio de la hostelería, pescadores o rederas. Si el menú fue o no del agrado de los comensales será una auténtica intriga hasta la emisión del programa, que ya se anuncia para próximamente en TVE.

Entonces, también se desvelará la identidad de los 15 aspirantes a convertirse en el nuevo Masterchef España. Al casting de esta sexta edición, se presentaron 23.000 personas, una cifra récord para este programa, de las que quedaron 150 finalistas. Si en la pasada edición, el jurado pedía «sencillez y humildad», ahora el requisito principal es «una locura», aseguró Cruz y Nagera durante el casting final. El talent show culinario arrasó en la pasada temporada cuya final obtuvo su récord de audiencia con casi 3,4 millones de espectadores.