Santoña destina 192.000 euros para la primera fase de cámaras de vigilancia

Santoña es de los pocos municipios de la región que aún no cuenta con cámaras de seguridad en sus calles. El Gobierno local se ha lanzado a videovigilar el entorno para intentar poner frente al vandalismo a la par que reforzar la seguridad ciudadana. El concejal de Obras y Urbanismo, Ricardo Fernández, explica que el despliegue de cámaras arrancará con su colocación en nueve emplazamientos. Lo primero de todo será crear un centro de control, que se fijará en la sede de la Policía Local. Todo el contenido que graben los aparatos será recibido en tiempo real por el Cuerpo.

En esta primera tanda se dispondrán cámaras de videovigilancia en el Fuerte del Mazo, en los depósitos de agua del monte, en el Fuerte de San Martín, en la plaza de toros y en el edificio de Las Caballerizas, que acoge los Servicios Sociales y la Policía Local. Otro de los lugares que pasará a estar controlado es el Faro del Caballo. Se colocarán dispositivos tanto al inicio de las escaleras como en la zona de la plataforma, al ser este rincón el que sufre continuos actos vandálicos con la pintada de grafitis en la torre y los muros de piedra y el abandono de restos de basura. Habilitar el sistema en este entorno, en mitad del monte, es algo más complejo ya que no se dispone de energía eléctrica. El edil señala que se colocarán placas fotovoltaicas en la caseta de madera situada al inicio de la bajada y en su interior albergará también los equipos necesarios y las baterías para dar suministro eléctrico a las cámaras por las noches. Esta primera fase se completará instalando dispositivos en la rotonda de Piedrahíta y en el primer tramo de la carretera 'de los puentes' para controlar los accesos a la villa y facilitar la identificación de matrículas en caso necesario. Actualmente, se está a la espera de recibir la autorización de Delegación del Gobierno para poder grabar y en cuanto se reciba el permiso, se licitará la intervención.

El proyecto continuará con una segunda fase valorada en 105.000 euros para colocar cámaras en el Ayuntamiento, la Casa de Albo, las Instalaciones Deportivas Municipales, el edificio de Capitanía, Batería alta de San Martín, Casa de la Juventud y cementerio. Se contempla una tercera fase de 101.00 euros que extenderá la videovigilancia a las plaza de San Antonio, Peralvillo y de la Villa, mercado de Abastos, Palacio de Chiloeches, Foresant, club náutico y albergue.