Santoñeses pide ahora que se declare Bien de Interés Local el ala oeste de Chiloeches

El partido Santoñeses no tira la toalla en su empeño por defender la integridad del antiguo hospital militar. Tras haber renunciado a presentar un recurso de casación contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC), que reconoce que el ala oeste del histórico edificio no es BIC, y haber sido declarada esta resolución firme por el Tribunal Supremo, ahora, la formación política opta por otra vía, fuera de los juzgados, para conseguir sus pretensiones.

El nuevo paso que han dado es presentar un escrito a la Consejería de Cultura del Gobierno de Cantabria solicitando la incoación de un expediente para la declaración como Bien de Interés Local (BIL) del ala oeste del edificio conocido como Palacio de Chiloeches.

Desde Santoñeses entienden que esta figura de protección puede ser la adecuada «para salvar el ala oeste de la demolición que planea sobre ella el actual equipo de gobierno PSOE-PRC, devolviéndole la protección que le fue retirada por un anterior gobierno del PP en 2014, mediante una modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) destinada a la construcción de un bloque de viviendas en el jardín del monumento».

El partido recuerda que la Ley de patrimonio Cultural de Cantabria define los Bienes Culturales de Interés Local como «aquellos bienes inmuebles, muebles o inmateriales que, sin gozar 'a priori' de la relevancia que definen a los Bienes de Interés Cultural, definen por sí mismos un aspecto destacado de la identidad cultural de una localidad o de un municipio».

Una descripción que, en opinión de Santoñeses, es «perfectamente válida» para un edificio que aparece ya rotulado como «hospital» en planos del ejército de Napoleón de 1811, 1812 y 1813. A su juicio, el histórico uso del inmueble como hospital militar «no se entiende sin la presencia física del ala, ya que ésta le dio a la instalación el volumen y el espacio suficiente para poder ser equipado para el uso sanitario». Además, destaca que está «documentalmente probado» que la actividad hospitalaria tuvo continuidad hasta bien entrado el siglo XX, pasando después a tener la función de cárcel durante la Guerra Civil, escuela en la posguerra y viviendas en la última mitad del siglo pasado.

Para Santoñeses, estos hechos constituyen «motivos más que suficientes para volver a proteger nuevamente el ala oeste, evitando así la mutilación del conjunto histórico». En todo caso, desde la formación instan al Consistorio y a la Consejería de Cultura a que arreglen el tejado del cuerpo principal del edificio, que lleva derruido desde 9 de mayo de 2016, «sin que se atisbe ninguna solución por el momento».