«Voy a seguir saliendo de Groucho en el carnaval hasta que me muera»

La Concejalía de Festejos ha decidido que tenga el honor de abrir de forma oficial el carnaval marinero como reconocimiento a sus casi 40 años participando en el gran desfile ataviado con el disfraz del popular actor y humorista estadounidense. «Y seguiré saliendo hasta el día que me muera», asegura. Tiene claro que al escenario de la plaza de San Antonio subirá la noche del jueves, 20 de febrero, vestido, como no podía se de otra manera, de Groucho y a buen seguro repasará las mil y una anécdotas que ha vivido metido en la piel de este personaje.

Aún no tiene claro qué dirá exactamente pero sí que subirá él solo pues «no tiene nada de nervios» ante este reto. Cuenta que han sido muchos los vecinos que le han felicitado al saber que va a ser el pregonero y «me han dicho que me lo merecía», dice con cierto orgullo. Y es que los santoñeses que le han visto febrero tras febrero alaban su gran caracterización y enorme simpatía cuando desfila.

Larrañaga participó por primera vez en el gran desfile del carnaval de Santoña en 1982. Lo hizo disfrazado de Groucho Marx con su traje, sombrero, gafas redondas e inseparable puro y ha repetido el mismo personaje en todas las siguientes ediciones. A sus 74 años sigue fiel a esta cita carnavalesca con la única pretensión «de dar ambiente y alegría al pueblo ese día».

Otra de sus particularidades es que siempre desfila solo porque «me gusta ir a mi aire y no me cohibe para nada». Cuenta que eligió el disfraz de Groucho porque sus amistades le dijeron que se parecía al auténtico en la cara y en la forma de andar. En los primeros años lució el mismo traje con el que se casó y que, según contó a este periódico, llevó a la tintorería para teñir de negro y luego, su mujer le hizo una cola de pingüino para unirla a la chaqueta. Lo completa con un gorro negro, las gafas, el bigote y se pinta más gruesas las cejas. En la boca siempre lleva un puro apagado. «Para parecerme aún más, en el desfile intento hacer los gestos habituales de Groucho». En los últimos años es habitual verle en la cabeza de la pasarela justo unos pasos más adelante de la figura del besugo.

Y aunque pocos los saben también ha acudido disfrazado del humorista y actor al desfile de la Batalla de Flores de Laredo, a las fiestas de Selaya y a las de San Mateo, en Reinosa. «Hasta me disfracé de Groucho cuando vino la Marigalante a Santoña y estuve hablando con Vital Alsar».