Secciones
Servicios
Destacamos
Vecinos de Fuente Las Varas en Solórzano siguen con el «zumbido» detrás de la oreja. Aunque hace dos años que Red Eléctrica Española (REE) prometió estudiar medidas frente a «los impactos acústicos y electromagnéticos» que denunciaron que generaba la subestación eléctrica, poco se ha ... hecho. «Se han plantado cuatro pinos y se han secado», decía esta semana el portavoz de los afectados, Miguel López, para describir la «ineficaz» pantalla vegetal que instaló la eléctrica de cara a mitigar el molesto sonido de la central. La propia compañía reconocía ayer que aunque «seguían trabajando», la zona es «árida y complicada» para que la medida correctora funcionase y crezcan los árboles.
En este punto, los vecinos se siguen quejando del ruido, un zumbido continuo y «muy molesto» que les resta calidad de vida y se propaga en un entorno natural privilegiado, donde la propia central por su propia estética rompe una postal de cuento. Lo que reclaman es que se cumpla la legalidad y se imponga una «impermeabilización acústica y visual con las garantías suficientes» para corregir estos dos aspectos. Para ello están recogiendo firmas de apoyo por todo el municipio, acompañados de un escrito-denuncia que han elaborado junto a Ecologistas en Acción y que harán llegar a las administraciones y a la Fiscalía Cántabra.
Y es que «los días que no hace viento» se superan, según denuncian, los parámetros legales de ruido. Algo con lo que no comulga la eléctrica que ayer mantenía, a través de su delegado en la zona norte, Antonio González, que en las mediciones que se hacen semestralmente «se ve que estamos dentro de los parámetros legales».
Pero las pruebas realizadas por los afectados dicen lo contrario, y «demuestran», según afirman, «que se han registrado picos que superan lo legal establecido». Por ello piden que se realice una auditoría externa a REE para medir esos parámetros y «evitar su manipulación». A la par, reclaman que, aunque se esté dentro de la legalidad, «se tenga en cuenta el efecto rebote», al estar situada la central entre montañas, así como la frecuencia continua del sonido. Según el portavoz vecinal, la propia alcaldesa, Gema Perojo, le ha trasladado el compromiso de realizar nuevas mediciones mediante medios municipales, tras aprobar recientemente la normativa de referencia.
Desde REE se reconoce que la orografía del lugar donde se ha instalado la central puede amplificar la sensación de ruido, pero de manera «subjetiva». «¿Qué pasa en Fuente Las Varas? Que no hay nada en el entorno y no se oye nada, por eso cualquier sonido añadido se percibe como más potente que en lo que en realidad es, pero si vas con medidores... ahí los números son los que son, los que marcan los niveles de ruido objetivo», defiende el portavoz.
La subestación aún no está a pleno rendimiento, pero cuando lo esté habrá más fuentes de ruido allí, reconoce REE. Y es en ese momento cuando quizás, sólo quizás, se podría actuar. «Llegado el momento, si se superan los niveles de ruido, trataremos de elegir las pantallas acústicas que se ajusten. Hay nuevos materiales que absorben el ruido y la idea sería tratar de introducirlo de forma experimental», dijo González. No obstante, la solución, si llega, tardará en hacerlo porque no se puede adoptar hasta que la central arranque totalmente. «Si con el seguimiento se verifica que el nivel de ruido es superior al legal, entonces sí tenemos que introducir medidas, no hay vuelta de hoja», dijo.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.