La biblioteca sin estrenar de Riotuerto

Aunque sus vecinos todavía no la hayan podido visitar, Riotuerto ya dispone de una renovada y ampliada Biblioteca Municipal. Las obras finalizaron en marzo del año pasado, justo cuando irrumpió la pandemia y hubo que confinarse. Así las cosas, desde entonces las instalaciones no han podido entrar en funcionamiento. No obstante, se está trabajando para que esté todo a punto para el momento en el que la situación mejore y permita su apertura. El proyecto se ha ejecutado con una financiación de 93.170 euros del programa Leader Asón- Aguera-Trasmiera.

«Quién la ha visto y quién la ve» es lo que seguramente pensarán los usuarios cuando finalmente puedan regresar a la instalación, que no sólo se ha modificado por completo, sino que se ha duplicado gracias a una ampliación de 64 metros cuadrados, con lo que el espacio disponible ahora es exactamente el doble que el previo a la reforma.

El resultado es una transformación radical, porque en la parte adosada (con planta en forma de ele al rededor al edificio original) que se ha levantado se han podido disponer dos nuevas salas: una de reunión y lectura (que servirá para el desarrollo de distintos talleres) junto a otra, que alberga el depósito y puestos de trabajo, ambos espacios servirán de zona de estudio y consulta, con un total de diez plazas individuales entre ambas.

Asimismo, en la dependencia diáfana preexistente se ha levantado una pared para crear una estancia dedicada a telecentro, que se ha dotado con cuatro nuevos ordenadores. Dichos equipos, además de para consulta y otros usos, servirán para impartir cursos de formación (como por ejemplo de informática para mayores), porque el aula también dispone de proyector. La zona restante -producto de la división a través del nuevo tabique- alberga la recepción y la zona infantil.

Además de crecer en espacio y dotaciones, la biblioteca ha ganado en iluminación natural, porque en la parte ampliada se han colocado unos grandes ventanales. Junto a la inversión de fondos Leader de 93.170 euros, por parte del Ayuntamiento se han desembolsado otros 10.000 euros para la adquisición de mobiliario, que se une al que ya tenían.

La reforma finalizó en marzo. «Me entregaron las llaves ese mismo mes, me quedé con ellas en la mano y sin poder abrir», resume la concejala de Educación y Cultura de Riotuerto, Cecilia García. El objetivo era poder iniciar una nueva etapa en la que las instalaciones abrieran de lunes a viernes tanto de mañana como de tarde, en lugar de únicamente en horario vespertino. Sin embargo, la puesta en marcha tendrá que esperar.

Por el momento las instalaciones siguen cerradas. No obstante, parte del personal contratado en el Ayuntamiento (en concreto cinco personas) a través del actual programa de Corporaciones Locales se está dedicando a llevar a cabo un inventario, catalogación y expurgo de los libros, con lo que ahora el espacio está lleno de cajas y tomos amontonados por colocar. «La labor todavía no ha finalizado, pero calculamos que disponemos actualmente de un catálogo de más de 8.000 volúmenes», explican, destacando la extensa sección de obras de Cantabria. Por otro lado, todos aquellos que decidan retirar serán donados.

La edil explica que hasta acometerse su rehabilitación, la biblioteca era «muy pequeña, pero muy bien surtida porque todos los años se adquirían libros por parte del Ayuntamiento». Asimismo, García valora que «teníamos un público muy fiel», y se realizaban en ella distintas actividades como talleres de animación a la lectura, cuentacuentos o talleres de marcapáginas. Además, durante años sirvió de biblioteca escolar, hasta que el CEIP Leopoldo y Josefa del Valle dispuso de una propia en el centro. Ahora el objetivo es, una vez que se reanude el servicio, volver a reenganchar a los usuarios y conseguir que otros se animen a convertirlo en un recurso para ellos, como por ejemplo un espacio de estudio o de consulta en el telecentro.

La biblioteca se encuentra en el centro neurálgico del término municipal, junto al colegio, el Museo de Artillería, el Ayuntamiento, las piscinas... Justo en esa calle se está llevando a cabo un proyecto a largo plazo para mejorar y actualizar la zona con el objetivo de ganar en seguridad. En concreto, se ha ensanchado la vía para que puedan cruzarse sin problemas dos vehículos, junto a la habilitación de una acera, de la que se carecía. También se ha señalizado la parada de autobús escolar y se ha mejorado la zona de aparcamientos.

Todas esas cuestiones se han acometido con una inversión del Gobierno regional, y ya se han ejecutado dos fases, la primera (más ardua) que comprendió la zona entre el colegio y el Museo de Artillería, y hace unos pocos meses otro tramo de acera que une con el polideportivo. El objetivo, tal y como ha detallado en varias ocasiones el alcalde, Alfredo Madrazo, es seguir ampliando hasta poder comunicar peatonalmente de una forma segura dicho espacio con la zona comercial y de bares de La Cavada. La remodelación de la biblioteca es un añadido más a toda esa transformación.