Secciones
Servicios
Destacamos
Contra viento y lluvia, la celebración de los 28 años del descubrimiento de la cueva de La Garma pudo llevarse a cabo ayer en Omoño (Ribamontán al Monte) con una serie de visitas guiadas a sus exteriores, una charla y comida. La ... ocasión merecía el esfuerzo, teniendo en cuenta que el yacimiento es toda una caja de sorpresas que no ha parado de dar alegrías en más de dos décadas de investigación. De hecho, este año se confirmó como el asentamiento humano más antiguo de Cantabria, con restos de una especie humana de hace cerca de 400.000 años, anterior a los Neandertales.
Hoy en día La Garma permanece inaccesible para el público general y sólo los investigadores pueden entrar en ella. Dicha decisión consigue que se conserven mejor los restos que guarda, pero también puede ser uno de las causas de que el público general todavía hoy no la sitúe. «La Garma es un sitio muy conocido en medios científicos, pero no populares», valoró Pablo Arias, director del proyecto de investigación de La Garma y uno de los responsables del contenido explicativo de ayer en Omoño junto a Roberto Ontañón, director del Museo de Prehistoria y Arqueología de Cantabria (Mupac) y de las Cuevas Prehistóricas de Cantabria.
Un desconocimiento que no hace justicia a la realidad que atesora. El yacimiento es calificado por sus investigadores de «joya» y sobre todo destacan que «no es una cueva más». Entre otros motivos, por la «cantidad y calidad de restos que ahí se encuentran», dijo Ontañón, además del amplio espectro temporal que abarca, anteriores a 300.000 años y hasta la Edad Media.
Actualmente, al año se hace una campaña, en agosto, en la que se extraen de la cueva restos. Para alcanzar a comprender el nivel de lo que hay en su interior, este año se sacaron 200.000 números de inventarios, algunos de esos lotes contienen más de un elemento. En todos los años de trabajo, ya se «habrán extraído un millón», calculó Arias. Y no sólo son huesos de personas, también hay abundancia de animales, en concreto son conocidos un león cavernario y el Palaeoloxodon antiquus, una especie extinguida de elefante que habitaba Cantabria.
De hecho, los investigadores apuntan que «hay mucho dentro que no queremos tocar para conservarlo tal cual está para las generaciones futuras», pero todavía hay mucha información en la cueva esperando para ser leída. La Garma va a ser fuente de información durante muchos años», recalcó Arias.
La celebración del cumpleaños de ayer fue la primera vez que se llevó a cabo con un programa tan completo. En anteriores ocasiones, desde el Ayuntamiento y la Junta Vecinal de Omoño se había organizado una marcha y una comida popular, y en esta ocasión se quiso conjugar la parte deportiva con la cultural. Para ello, desde el Instituto Internacional de Investigaciones Prehistóricas de Cantabria y la Universidad de Cantabria se organizaron salidas explicativas y una charla. A causa de la lluvia hubo problemas tanto para la marcha por el pueblo como para las visitas guiadas, pero finalmente estas últimas no se cancelaron y, en treguas que concedieron las nubes, los asistentes (en tres grupos de 10 personas) se pudieron acercar a la entrada de la cavidad.
Desde el Ayuntamiento, el alcalde, Joaquín Arco, aboga por ampliar los encuentros expositivos en Omoño ya que ahora mismo la cueva sólo se puede conocer a través de una visita virtual inaugurada este año en el Mupac. Entre hallazgo y hallazgo el regidor sigue demandando del Gobierno regional que cumpla su compromiso de dotar al municipio de un centro de interpretación, que tal y como destacaron Ontañón y Arias, sería un «importante apoyo» tanto para la parte divulgativa como para las campañas de investigación.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Estos son los mejores colegios de Valladolid
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.