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Viven y son felices en su pueblo. Algunos de ellos tienen ganas de salir fuera para aprender y volver a él con una maleta llena conocimientos. Otros prefieren quedarse y creen que no es necesario dejar atrás su lugar de origen para triunfar. Pero a ... todos les une un mismo interés, aunque no lo saben: quieren seguir viviendo en su pueblo. Crear redes entre todos ellos, darles la posibilidad de poner en común sus problemas, poner voz a sus inquietudes y que conozcan todas las posibilidades que se les ofrece desde las distintas administraciones son los objetivos del proyecto 'JR21Cantabria: Diálogos de la Juventud Rural', enmarcado dentro del programa europeo Erasmus+, que el próximo mes de abril celebra su segundo encuentro en Loredo.
Los cinco Grupos de Acción Local de Cantabria: Campoo-Los Valles, Liébana, Valles Pasiegos, Asón-Agüera-Trasmiera y Saja-Nansa, que actúa como coordinador, participan en este proyecto. Beatriz Cárcamo, técnica del Punto de Información de Asuntos Europeos de la comarca Asón-Agüera-Trasmiera, explica que «uno de los objetivos del proyecto era localizar a los jóvenes, porque en comarcas como la nuestra, con diecisiete municipios y un solo instituto, hay muchos jóvenes de entre 15 y 18 años que salen fuera de la comarca a estudiar, se dispersan y después resulta difícil contactar con ellos». En este sentido ensalza la iniciativa del Ayuntamiento de Ramales, que envió cartas informado sobre JR21 a todos los domicilios donde había jóvenes de entre 15 y 29 años «y algunos ya se han apuntado», señala con satisfacción.
Para Valentina Calle, una de las participantes en el encuentro celebrado el pasado julio en Cabuérniga y vinculada al proyecto desde entonces, la experiencia «es una herramienta muy útil para conectar a los jóvenes». Natural del Ucieda, Valentina, de 22 años, estudia joyería en la Escuela de Arte de Puente San Miguel y es también compositora y cantante. «Trabajar en un grupo de JR21 te ayuda un montonazo para otras muchas otras cosas, como, por ejemplo, para trabajar en grupo en clase. Es súper útil». Para esta joven, que repetirá experiencia y acudirá a la próxima cita de Loredo, las redes creadas dentro del proyecto permiten a los de su generación a estar al día de las propuestas que desde las distintas Administraciones se les ofrece, al tiempo que les presta también asesoramiento. «Nosotros tenemos que hacerlo, pero ellos te ayudan, te dan consejo...», explica Valentina.
«JR21 fue la oportunidad perfecta para conocer personas de mi alrededor que tienen mis mismos problemas», valora Valentina al referirse al primer encuentro. A esta joven de 22 años de Ucieda, con grandes inquietudes artísticas y sociales, el primer encuentro le permitió «poner palabras a cosas que no estaban bien y no sabía cómo expresar».
Buen conocedor de los programas Erasmus, para Jhonatan España participar en el primer JR21 le permitió «poner de manifiesto la problemática que afecta a los jóvenes del mundo rural: la falta de empleo, el transporte público, la despoblación... y poder proponer medidas que mitiguen las limitaciones por haber nacido en un pueblo».
Al primer encuentro celebrado en julio de 2021 asistieron medio centenar de chicos y chicas de 21 de los 74 municipios agrupados en los cinco Grupos de Acción Local, un número que se espera superar en esta segunda edición.
«Intentamos que los jóvenes sean más activos y se involucren más en la sociedad, que participen más», explica Madona Ruiz, técnico del GAL de Valles Pasiegos, quien recuerda que la primera edición permitió a chicos y chicas «contactar con el personal de la Administración, con los políticos, con los técnicos... y ver cómo ellos los perciben». «Los temas se trataron desde la perspectiva de los jóvenes del mundo rural y fueron ellos quienes expusieron las necesidades que tienen: la falta de empleo, el transporte público, la despoblación...», señala la técnico de Valles Pasiegos.
Fue precisamente esa puesta en común de los problemas que afectan a este sector de la población rural de Cantabria lo que Jhonatan España valora como uno de los aspectos más positivos de JR21. Este ingeniero mecánico de 27 años natural de Selaya, que desde hace un mes trabaja en Barcelona, es un profundo conocedor del programa Erasmus, que en su día le permitió formarse durante un año en una universidad belga. Más tarde, y a través de otro de los proyectos Erasmus, participó en un programa dedicado al fomento del bienestar del medio natural en Georgia. «Estos encuentros te permiten estar en contacto permanente con las posibilidades que hay en la región», destaca Jhonatan al referirse a esa 'red' que se creó a partir de julio de 2021 y que se ha plasmado en un 'chat' muy activo. «En ese chat informamos sobre concursos, subvenciones, conferencias, voluntariado...», explica Ana Canales, técnico del Grupo Saja-Nansa. Para Canales, con proyectos de este tipo «estamos sembrando muchas semillas, no es algo que se verá de hoy para mañana». Considera que «mantener la confianza de este sector de la población es muy importante» y es algo en lo que se trabaja cada día.
Para la periodista y técnico del Punto de Información de Proyectos Europeos de Campoo-Los Valles, Benhur Valdés, «los jóvenes rurales son un franja de edad a la que no se les ha dedicado mucha atención, y por eso que se les de la oportunidad de hablar en JR21 es muy importante». Afirma que desde que se celebró el primer encuentro «están germinando mucho proyectos», aunque como señala su compañera del grupo Saja-Nansa, «los cambios más importantes se producen a nivel personal, a partir del contacto de unas personas con otras».
Aunque el listón del primer encuentro quedó muy alto y restan pocos meses para que se dé por finalizado el proyecto JR21 (junio de 2022), desde los cinco Grupos de Acción Local participantes se ha hecho un llamamiento a los jóvenes de los 72 municipios para que se sumen a la iniciativa. «Estamos haciendo un vídeo para animar a los jóvenes y fomentar la valoración del mundo rural. Para identificarlo ellos utilizan palabras como tradiciones, familia, raíces, arraigo, folklore...», señala Valdés.
La cita ya está señalada en el calendario: será del 22 al 24 de abril en el Albergue Juvenil de Loredo, donde un equipo de jóvenes inquietos tratará de echar por tierra denominaciones como 'la España vaciada' para referirse a la España rural, pues como ellos mismos dicen la «España rural somos nosotros».
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