Liérganes y Miera alertan de la frecuente presencia de vacas sueltas en la CA-260

Los municipios de Liérganes y Miera, a través de sus respectivos representantes municipales, han alertado a Ganadería, Tráfico y el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de la presencia frecuente de «vacas sueltas» en la CA-260, que une Liérganes con la localidad de Mirones (Miera). Los ayuntamientos han contabilizado una «media docena» de accidentes, de diversa consideración, que vinculan a estos hechos.

El último de estos accidentes de tráfico lo sufrió, «a principios de mes», una trabajadora municipal de Liérganes cuyo coche quedó «siniestro total», explicaron desde los ayuntamientos. Según avanzó el alcalde de Liérganes, Santiago Rego, a preguntas de este periódico, la trabajadora está «de baja» a causa de ese siniestro y se encontró al animal «al tomar una curva», cuando se disponía a ir a su casa tras la jornada de trabajo.

La concejal de Ganadería del mismo municipio, Ana María Ríos, confirmaba que se «ha dado parte a la Guardia Civil y al Seprona varias veces», pero que el problema de animales sueltos en la vía sigue presente y hay miedo de que pudiera ocurrir una desgracia. «No sé a qué están esperando para hacer algo, porque es cierto que el tema aquí nos preocupa mucho», dijo la edil, que recordó la reciente muerte de una persona por el atropello de una vaca a la altura de la A-8 en Quijas (Reocín).

El problema abarca a otros municipios vecinos, cuyos habitantes también sufren las consecuencias de la presencia de estos animales sueltos, pero con dueño. En el caso de Miera, el primer teniente de alcalde, José Miguel Crespo, también explicaba que él mismo había llamado recientemente a Tráfico y al Seprona, tras encontrarse las vacas sueltas. Según Crespo, el asunto es «preocupante» porque se han contabilizado ya «seis accidentes en lo que va de año».

«La mayoría han sido leves, pero el último ha sido hace veinte días y el coche quedó siniestro total», dijo. «Además la zona no tiene cobertura para llamar por el móvil a emergencias», afirmó a modo de advertencia para los conductores. Los accidentes se han concentrado, según los testimonios de las personas que los han sufrido, entre los puntos kilométricos 2 y 5 de la CA-260, un paso habitual para los vecinos de las localidades de Miera y también da acceso al municipio de San Roque, que también estaría afectado por esta situación.

Aunque hay «numerosas llamadas» registradas en el 112 y se avisa con cierta frecuencia a la Guardia Civil, el problema no ha desaparecido y las vacas siguen estando presentes de día y de noche sin que haya habido una intervención que frene sus peligrosas escapadas, casi siempre en la misma zona. La última 'excursión' de una pequeño rebaño de ellas se localizó el jueves pasado.

En este sentido, la recomendación que se está dando a los denunciantes, según sus testimonios, es que si los animales tienen crotal se llame a Tráfico para que se expida un boletín de denuncia por invasión de calzada. A la par, lo que suelen recomendar las aseguradoras es que se avise a las autoridades competentes para que dejen constancia de lo ocurrido, al 112 si se producen daños personales, así como al Seprona (062) para que se hagan cargo del animal atropellado.

No obstante, la principal preocupación de ambos ayuntamientos ahora es que se determine la competencia para localizar al dueño de estos animales y se frenen sus peligrosas escapadas.

Visto el problema, el Ayuntamiento de Liérganes pasó a la acción el viernes. Tras estudiar las competencias, ante las dudas generadas y la falta de intervención sobre estos animales, se ha presentado un escrito en la oficina de extensión agraria de Solares, dependiente de la Consejería de Ganadería, para que esta actúe en el asunto, se localice el problema y se requiera a los ganaderos responsables para la mejora del cercado que evite que los animales salgan a la vía. «Les hemos presentado un oficio explicando que hemos recibido quejas y que hay que extremar las precauciones con las medidas que correspondan en los vallados o cercados que no presenten la suficiente seguridad», resumió el regidor.