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La regionalista María Higuera atravesó las puertas del Ayuntamiento de Medio Cudeyo como concejala hace 17 años. Curtida tanto en la bancada del gobierno como de la oposición, fue en febrero de 2022 cuando tomó el bastón de mando tras la renuncia de Juan José Perojo. En su primer encuentro con las urnas como cabeza de lista no cosechó la mayoría absoluta, aunque consiguió proclamarse alcaldesa en minoría. Una situación que cambió dos meses después al sellar un pacto con el PSOE. «Quiero que mis vecinos sientan el Ayuntamiento como su casa. Estamos aquí para defender sus intereses y escuchar sus necesidades. Gobierno para los diez pueblos del municipio y me preocupan todos por igual».
–Comenzó esta legislatura gobernando en minoría. ¿Por qué costó tanto pactar con el PSOE?
–No creo que sea el momento de echarnos culpas, pero sí que es cierto que hubo una falta de diálogo. Las negociaciones del pacto comenzaron casi una semana antes de la toma de posesión de la Alcaldía y, eso, hizo que no nos pusiéramos de acuerdo.
–¿Goza el bipartito de buena salud?
–Es un pacto sólido, que no va a ocupar ningún titular durante esta legislatura y va a terminar perfectamente, tal y como venimos gobernando en coalición en las pasadas legislaturas. Goza de muy buena salud. Tenemos muy buena relación personal y profesional.
–Las relaciones con el PP siguen enquistadas. En algún pleno han aludido a que ambos «viajan con mochilas heredadas». ¿Tan difícil es dejar el pasado atrás?
–Siempre digo lo mismo. En los Ayuntamientos es difícil olvidarnos de las personas y no es cuestión de partidos. En mi caso, para nada es un tema partidista. Por parte de los dos, nuestra relación es educada y por mi parte, de máximo respeto institucional como concejales y miembros de la Corporación de Medio Cudeyo y representantes de gran parte de la población que les ha votado.
–¿Han empezado ya con el Plan de Sostenibilidad Turística?
–Ahora mismo hemos licitado la gerencia del Plan, y a la par, estamos preparando proyectos y pliegos para intentar licitarlos. Contempla 41 actuaciones. Hemos podido empezar a trabajar con el Plan, que tiene una tramitación con fondos europeos muy compleja, con prácticamente seis meses de retraso. El Gobierno de Cantabria transfirió los fondos el pasado mayo con un verano por delante. Nos complicó mucho la parte correspondiente a este 2024. Pero no vale lamentarse. Hay que trabajar y estamos en contacto con la Consejería.
–¿Qué actuaciones contempla?
–El objetivo del Plan es potenciar distintos activos turísticos como Peña Cabarga y el Pico Castillo así como la puesta en valor de la Finca Museo Marqués de Valdecilla, el parque de Mina Pepita y nuestro turismo termal. En Medio Cudeyo, al igual que en el resto de Cantabria, cada vez es más notable la presencia de turistas en verano.
–¿Qué proyectos tiene comprometidos con las consejerías?
–Educación está llevando a cabo ahora la instalación de un ascensor en el Instituto Ricardo Bernardo y se ha licitado la construcción de un establo en el Centro Integrado de FP La Granja. Con Turismo, tramitar conjuntamente el Plan de Sostenibilidad Turística y ansiamos la apertura de nuestro querido pirulí de Peña Cabarga, que está terminado, pero a fecha de hoy no tenemos conocimiento del plan del Gobierno de Cantabria para llevar a cabo su reapertura. Por parte de Fomento, estamos trabajando en un proyecto que ya figuró en el presupuesto regional del año anterior y que esperamos que se haga realidad, que es el saneamiento de Rioz y San Vítores. Es un compromiso del Gobierno regional y el consejero y confío en que cumpla su palabra.
–El no compartir siglas en esta legislatura se notará en las inversiones regionales
–Sería hipócrita si dijera que no va a repercutir. Probablemente sí, no nos vamos engañar. También digo que si los proyectos mencionados se materializan probablemente no se note y se hagan cosas. A fecha de hoy se han llevado varios contratos menores a Fomento y no se ha ejecutado ninguno.
–¿Y qué obras se acometerán con fondos municipales?
–Hace dos semanas aprobamos una modificación de crédito con cargo al remanente de tesorería de casi 2 millones de euros. Se van a llevar a cabo importantes obras en los diez pueblos. Se continuará con el plan de asfaltado de carreteras en todo el municipio (600.000 euros) y se va a cubrir la pista polideportiva del colegio Peña Cabarga, así como el parque infantil del ferial en Solares. Se van a mejorar las instalaciones deportivas y aunque no está incluido en estos fondos se va a adjudicar en 2025 la rehabilitación integral de la recién adquirida nave de Campolejo.
–¿Por qué se oponen a la grabación de los plenos? Alegan un posible mal uso de las imágenes pero en otros ayuntamiento ya se graban y no hay incidencias...
–En un primer momento nos opusimos no solo por eso. Requiere de una inversión y ahora mismo el Ayuntamiento considera que hay otras prioritarias. Estamos valorando preparar nuestros plenos, despachos y alguna sala para reuniones telemáticas. Me encantaría que el pleno estuviera lleno de gente, pero no es así. No tengo ningún miedo a que me graben y vean mis actuaciones, pero también hemos visto lo que hace un móvil y lo que se pretende hacer con esas grabaciones. En principio, nos hemos opuesto por un tema económico y de prioridad de inversiones. En el futuro y con el paso del tiempo se hará y no habrá ningún problema.
–¿Para cuándo la reapertura del Pirulí de Peña Cabarga y qué se sabe de la Cámara Oscura?
–La obra del Pirulí está ya terminada. He pedido una reunión con el nuevo consejero de Turismo, pero acaba de llegar. Entiendo que si no me han dicho nada no hay una reapertura inminente. Abrirlo en invierno no parece lo más apropiado; quizás se ha perdido la oportunidad de abrirlo en septiembre y octubre. Estamos expectantes y deseando conocer noticias. En cuanto al proyecto de la cámara oscura la anterior consejera me dijo claramente que se desestimaba y queremos saber qué va a haber en el primer mirador.
–Las cámaras de vigilancia han disuadido a los vándalos del parque Mina Pepita y tras su restauración pugna con la Finca del Marqués de Valdecilla como baluarte turístico.
–Es verdad. Además de las cámaras de vigilancia, la colocación de nuevas figuras mitológicas y su rehabilitación ha hecho que sea más atractivo de lo que era en principio, dándole el empuje definitivo. Quiero pensar que el que viene a Medio Cudeyo visita las dos cosas. Al contrario de la finca, donde hay un registro de las visitas, en Mina Pepita el acceso es libre y no tenemos datos de visitantes, pero nos damos cuenta que el trasiego es total. El turismo familiar está muy en auge.
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