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La semana que viene, el día 15 para ser más exactos, tenía la esperanza el Ayuntamiento de Ribamontán al Mar de dar por finiquitada la ... reforma integral de la plaza central de Somo. Finalmente, no va a ser así y los trabajos se extenderán al menos hasta que finalice el presente mes. No obstante, aunque la nueva fecha sobrepasa las previsiones iniciales del Consistorio, cuya intención era la de comenzar la temporada de verano sin las inevitables molestias de las obras, todavía los trabajos están dentro del plazo de ejecución, puesto que el mismo da de margen precisamente hasta finales de este mes.
El principal contratiempo para no haber cumplido con la expectativa de fin de obra que tenía el Ayuntamiento, según aducen desde el equipo de gobierno (PRC), es la huelga del metal. «Ahora mismo quedan por hacer muchas tareas en las que se utiliza acero, como los revestimientos de los aseos y la nueva pista polideportiva», trasladan desde el Consistorio. Resta también la mayor parte del suelo, pero esta misma semana se ha abordado el ajardinamiento y ha concluido la instalación de luminarias.
Por lo demás, los operarios de la empresa adjudicataria, Gaby, trabajan de sol a sol para cumplir con el periodo de ejecución, que finaliza el 30 de junio. Así las cosas, día a día la plaza va cogiendo forma. Ya se aprecian sin dificultades las distintas zonas con las que contará:las gradas, la estructura de los nuevos aseos públicos, el escenario para espectáculos... junto a todo ello habrá también, como tenía antiguamente, una zona de juegos renovada y una pista polideportiva completamente moderna e ideada para evitar molestias de ruidos a los vecinos.
El resultado es una obra de largo alcance −1,5 millones de presupuesto sufragado por las arcas municipales− que rehace por completo este espacio público que se había quedado obsoleto y que actualiza, al tiempo que suma, nuevos usos y servicios para residentes y visitantes. De hecho, la plaza y los espacios aledaños están especialmente pensados para el esparcimiento de los transeúntes, por eso se han eliminado los aparcamientos de una de las calles colindantes, la avenida Trasmiera, y se han reducido en parte en el otro vial que la circunscribe, la Peñas Blancas, donde los vehículos pasan a aparcar en línea en lugar de en batería. De esta forma, la oferta de plazas de estacionamiento en la zona comercial y principal de Somo, el barrio Las Ventas, se ve sensiblemente disminuida.
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