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Héctor Ruiz
Lunes, 12 de agosto 2019, 07:37
Un empate a cuatro concejales del PSOE y el PP sirvió en los comicios de 2015 para situar al candidato del PRC, Constantino Fernández, como ... alcalde por primera vez. Lo hizo en solitario, sin un pacto de gobierno y con tan solo tres ediles regionalistas. Gobernar ante ese inusual panorama, siendo la fuerza menos votada, supuso «cuatro años muy duros», y el regidor denunció que se enfrentaba «a un bloqueo» por parte del resto de partidos, que en su opinión le llevó a perder varias subvenciones. Sin embargo el horizonte de los próximos cuatro años es muy distinto para Fernández, que en esta ocasión disfrutará de la mayoría absoluta otorgada por las urnas.
–De gobernar siendo el partido menos votado a obtener la mayoría absoluta, ¿afronta la Alcaldía de otra manera?
–Saber que tus proyectos van a salir adelante es gobernar con una tranquilidad absoluta. Eso sí, yo no tengo ninguna intención, y creo que así se ha demostrado en los últimos plenos, de pasar el rodillo de la mayoría absoluta, sino que a la oposición le he ido remitiendo por correo electrónico toda la documentación de los expedientes ytienen mi oferta para sentarnos a valorar cualquier tema o diferencia que precisen.
–¿De haberse repetido los resultados de la anterior legislatura habría intentado formar gobierno?
–La experiencia fue muy dura de llevar. Los vecinos de Villaescusa no se merecen que se paralice un Ayuntamiento en lo que respecta a las inversiones municipales, que se podían ver estancadas al gobernar con una minoría. Sin embargo, hubiésemos buscado la forma de llegar a un acuerdo, lo tengo claro.
–¿Cuál ha sido la clave para ese cambio de tornas que les llevó a la mayoría absoluta?
–La clave ha sido mucho trabajo, porque pese a la situación en la que estábamos hemos conseguido inversiones muy importantes. Otro factor determinante ha sido la cercanía. Ahora hay ayuntamientos que están sacando adelante la idea de mensajearse con el alcalde, pero eso nosotros lo llevamos haciendo cuatro años. El 90%de la gente de Villaescusa tiene mi teléfono y estoy disponible tanto ahí como en redes sociales. Yo creo que todo ello ha influido para que los ciudadanos hayan dado masivamente el espaldarazo a nuestra candidatura.
–Uno de los primeros cambios que ha habido es la ampliación de sueldos por dedicación parcial, entre ellos el suyo...
–He estado 12 años como primer teniente de alcalde y después cuatro como regidor en los que dije que mientras mi situación económica me lo permitiera y viviera de mi sueldo de directivo del Liberbank no recibiría ninguna dedicación salvo por asistencia a plenos. Ahora la cosa ha cambiado, ya no estoy en Liberbank desde hace dos años y en ese tiempo he vivido de mis ahorros y creo que no era justo porque mi cuenta cada vez iba para abajo. Yo tengo una dedicación de seis horas, y puedo asegurar que estoy en el Ayuntamiento mucho más tiempo. Esa es la causa de que me haya fijado un sueldo de 2.000 euros brutos al mes. Además hay dos nuevos concejales que van a tener una dedicación parcial de quince horas semanales porque van a desarrollar un trabajo activamente.
–Uno de los proyectos que no salió adelante la pasada legislatura fue construir una nave-almacén, por la que se perdió una subvención del Gobierno de Cantabria.
–Eso es, perdimos 275.000 euros de la Consejería de Obras Públicas para ese proyecto. La primera fase era la nave-almacén subterránea en Liaño, la cual en el pleno de la semana pasada aprobamos inicialmente y antes del 31 de diciembre habrá que hacer una modificación de créditos con cargo al remanente de tesorería del 2018 para ejecutar el proyecto. La segunda fase consiste en construir un centro social sobre esa misma base, para lo cual espero conseguir los fondos necesarios hacia 2020.
–¿Qué otros proyectos tiene?
–Estamos dando los primeros pasos para adquirir 8.000 metros cuadrados de suelo rústico en Villanueva, frente al Ayuntamiento, donde ubicaríamos un edificio dedicado a biblioteca y centro de juventud.
–Por lo que veo cree que un punto a mejorar de Villaescusa son las dotaciones culturales.
–Villaescusa tiene dotaciones culturales muy diseminadas y muy colapsadas, donde no se da respuesta a la demanda de los vecinos. Lo que necesitamos es un edificio en el que los jóvenes dispongan de un espacio en el que permanecer con un horario de apertura amplio. Eso combinado con una oficina de información juvenil y una biblioteca con varias estancias. Además, en torno al Ayuntamiento hace falta crear plazas de aparcamiento, porque en esta zona está ubicado todo: consultorio médico, colegio, instalaciones deportivas...
–A finales del pasado mes anunció que hay dos proyectos privados para construir residencias de ancianos...
–En realidad hay tres iniciativas, y dos de ellas ya han presentado la documentación y se encuentran en distintas fases de tramitación. La realidad es que hay 750 vecinos mayores de 65 años en Villaescusa que tarde o temprano, tal y como está montada la vida, acabarán necesitando este tipo de instalaciones, y que hasta el momento no tenemos.
–También la farmacéutica Cantabria Labs está ultimando su traslado a Villaescusa, ¿ante el interés de todas estas empresas está previsto impulsar el Plan General de Ordenación Urbana?
–La farmacéutica está en una fase muy avanzada del traslado y la previsión es que en septiembre u octubre empiecen a funcionar a pleno rendimiento. En el último trimestre haremos un contrato anticipado para sacar adelante la redacción del PGOU y en el presupuesto de 2020 dotaremos una partida para su amortización. La idea es favorecer que se puedan instalar todas estas empresas que están demandando suelo industrial en Villaescusa porque estamos cerca de Santander y la autovía Solares-Torrelavega está accesible.
–¿Habrá algún cambio de gestión?
–La próxima revolución es la ecológica, así que trabajaremos en el respeto al medio ambiente. En ese sentido hay varios programas, uno de ellos estará centrado en la eficiencia energética y la contaminación lumínica, para lo que queremos cambiar todo el alumbrado publico a sistema led.
–En la legislatura anterior apostataron por el patrimonio industrial y minero del que disponen como potencial turístico, ¿van a seguir trabajando en la misma línea?
–Así es. En las últimas semanas, junto con la Asociación para la Defensa del Patrimonio del Valle de Villaescusa, hemos entrado en contacto con un museo de la minería en los Alpes franceses. Nuestra intención es acercarnos hasta allí para conocer cómo lo han gestionado e intentar que los restos mineros de la planta de concentración se transformen en uno de los motores culturales y turísticos de Villaescusa. Eso más el Macizo de Peña Cabarga, esa importante área que esperemos que dentro de poco se empiece a desarrollar con el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales del Macizo de Peña Cabarga, que afecta a cuatro municipios y que es un valor de naturaleza que ahora ya tiene mucho uso en el aspecto deportivo, pero que hay que darle su lugar en el ámbito cultural, y en la riqueza minera que allí hubo.
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