Los salmones comienzan a remontar el Miera 200 años después

El remonte del salmón al curso alto del río supone la culminación del proyecto LIFE 'Conservación de la biodiversidad en el río Miera' desarrollado por la Fundación Naturaleza y Hombre desde el año 2013. Años durante los que se han llevado a cabo distintas actuaciones de protección y fomento de la fauna y flora autóctonas, que incluye una intensa labor de reforestación, y que han favorecido a especies como la nutria europea o el salmón atlántico en una zona considerada de Especial Conservación (ZEC) dentro de la Red Natura 2000.

La vuelta de los salmones aguas arriba es una verdadera carrera de obstáculos donde hembras y machos pelean contra corriente y tienen que salvar los saltos naturales y las presas que ha creado el hombre. Prueba del esfuerzo es el peso que pierden y, en el caso de los ríos de muy largo recorrido, cosa que no ocurre en Cantabria, pueden llegar a morir exhaustos. Aquí algunos se quedan en el río después de desovar -los 'zancones'- y otros regresan al mar para volver al año siguiente a desovar de nuevo, y de nuevo salvar los obstáculos del río.

El proyecto de la Fundación Naturaleza y Hombre ha permitido la creación de estas escalas para ayudar a estos peces y a otros, como truchas o anguilas, a superar el obstáculo que suponen los azudes (pequeñas presas) de modo que puedan completar su ciclo de reproducción y su población se vea incrementada en el río.

«Hacía más de 200 años que los salmones no llegaban a ese tramo del río», ha destacado el presidente de la Fundación, Carlos Sánchez, quien ha planteado que ahora los peces podrán remontar hasta la cuenca alta del Miera. «Gracias a estos pasos, el mejor hábitat del río se está liberando ahora», ha señalado. También las truchas están remontando las presas, según la información que recibe la Fundación de algunos ejemplares marcados con microchip.

Las escalas, todas en el marco del proyecto LIFE Miera, se han acondicionado junto a las presas de Revolvo, de cuya adaptación se ha encargado la Confederación Hidrográfica del Cantábrico; El Arral y Rubalcaba, estas dos últimas bajo la supervisión de Fundación Naturaleza y Hombre.

En el caso de El Arral, se ha optado por una escala de artesas (una especie de escalera para peces) levantada en la margen izquierda, completamente separada de este Bien de Interés Cultural e integrada en el entorno por medio de su recubrimiento con piedra.

En Rubalcaba, la intervención ha consistido en un murete de piedra similar a la del azud que, reteniendo el agua a modo de estanque, favorece que los salmones puedan salvar el obstáculo realizando dos saltos a contracorriente de menos de un metro de altura cada uno.

Previo al comienzo de estas intervenciones, y para que tampoco la fauna se viese afectada, se efectuaron sendos rescates de peces, que después fueron liberados río arriba.

El proyecto LIFE Miera está coordinado por FNYH y cuenta con la empresa pública MARE y la Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria como beneficiarios asociados. El proyecto se ha desarrollado gracias a la cofinanciación de la Unión Europea a través de su programa LIFE de conservación medioambiental; al apoyo de Fundación Biodiversidad, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica; y al de la citada Consejería.