El arte rupestre de La Pasiega recobra su esplendor

Restauración. Los trabajos, abordados desde el pasado año, garantizan su preservación para las generaciones venideras

Guillermo Balbona

Santander

Domingo, 1 de noviembre 2020, 08:04

El arte rupestre de la cueva de La Pasiega recobra su esplendor, según revelan los trabajos de conservación y restauración desarrollados por la Consejería de Cultura de la mano del especialista Eudald Guillamet. Según los expertos, estas labores están ofreciendo unos resultados «espectaculares». Las tareas que se ejecutan actualmente sobre los lienzos parietales de la cueva, que dan soporte a algunas de las mejores obras del arte rupestre paleolítico mundial, «favorecen la conservación de las pinturas y grabados y mejoran ostensiblemente la percepción de las obras parietales».

Hace ahora dos años la autoría neandertal en la cueva La Pasiega abría uno de los debates más intensos y agrios entre prehistoriadores y científicos. Las dataciones, en torno a 65.000 años, que publicó en la revista 'Science' un equipo internacional y multidisciplinar de investigadores para tres cuevas de la península ibérica -junto a La Pasiega en Puente Viesgo, Maltravieso en Cáceres y Ardales en la provincia de Málaga- , propició la polémica en torno al valioso conjunto paleolítico de las cuevas con arte rupestre de Cantabria, diez declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, entre ellas La Pasiega. Los trabajos en curso, que se iniciaron el pasado año, consisten en la retirada «por medios mecánicos de polvo y gotas y manchas de barro que ensucian, deslucen y comprometen la conservación de las pinturas y grabados de la cueva. Las tareas se han iniciado por el sector denominado Galería A y los resultados son «enteramente satisfactorios». La intervención se realiza exclusivamente con medios mecánicos, sin tocar en ningún caso las pinturas y grabados ni emplear producto químico alguno. Los instrumentos que utiliza Guillamet a través de una delicada y meticulosa labor son similares a los que podría utilizar un pintor: «Pinceles de marta de diferentes grosores y dureza, esponjas de material no degradable y agua de la propia cueva».

El objetivo, según subraya el especialista, «no es realizar una limpieza radical, sino eliminar la suciedad recuperando la textura original, limpia e igualada en toda la superficie».

El resultado más palpable de los trabajos se traduce en «la recuperación visual de la geología y el arte parietal de las cavidades, aunque el más importante es garantizar su preservación para las generaciones venideras».

La colaboración de Guillamet con Cultura se remonta a finales del pasado siglo cuando tuvo lugar el descubrimiento de las pinturas en El Pendo. Guillamet se integra entonces en el equipo multidisciplinar que realizó las intervenciones de conservación y valorización del arte parietal de la cueva y que han permitido la apertura al público de la cavidad. En 2004 desarrolla una propuesta de colaboración con el Gobierno para ampliar las actuaciones de conservación-restauración a otras cavidades como Chufín, Hornos de la Peña, El Castillo y Las Monedas.

La colaboración de Guillamet con Cultura se remonta más de veinte años con el descubrimiento de las pinturas de El Pendo

Las actuaciones, iniciadas en 2014 y por campañas anuales desde hace tres años, han incluido la eliminación de suciedad superficial (polvo) y también la retirada de las paredes de restos de barro y, en algunos casos, cementos, residuos indeseables de las grandes obras de acondicionamiento que se realizaron en los años cincuenta a setenta para hacer posible la visita pública a las cuevas.

Guillamet, restaurador de pintura rupestre, pintura mural y piedra, asesor de instituciones internacionales (ONU, Unesco, Getty Conservation Institute, Fundació Pilar i Joan Miró...), ejerce como colaborador en proyectos de datación de pinturas rupestres y participó también en el descubrimiento de un pigmento azul nuevo en la pintura medieval románica.

La actual intervención de Guillamet en La Pasiega, apuntó el vicepresidente y consejero Pablo Zuloaga, «se enmarca en las políticas de protección y conservación de nuestro patrimonio que impulsa el Gobierno». Zuloaga recordó que la relación entre Cultura y Guillamet, un «experto reconocido en todo el mundo», ha sido estrecha a lo largo de los últimos años.

En opinión del vicepresidente, «tener en nuestro territorio un sistema de cavidades amparados por el sello de la Unesco como Patrimonio de la Humanidad, nos obliga a mantener las cuevas y el arte rupestre que albergan en las mejores condiciones posibles para que puedan ser disfrutados por las generaciones venideras, y para conseguir tal fin, mantenemos contactos con los especialistas más prestigiosos en el campo de la conservación y recuperación».