Un torneo de balonmano con residuos cero: 800 botellas reutilizables y táper para comer

¿Y cómo lo harán? Para empezar, se acabó eso de utilizar dos o tres botellas de plástico por cada niño. En el evento participarán 800 jugadores de balonmano de 23 clubes de Asturias, Castilla y León, País Vasco y Cantabria y cada uno de ellos recibirá un kit de bienvenida en el que se incluirá una botella reutilizable para evitar envases de un solo uso. Podrán rellenarlas en la decena de grifos que se instalarán de forma provisional en el campo de fútbol Vargas, donde se celebrará el evento, aprovechando la red de suministro municipal.

Para comer habrá la tradicional paella y macarrones 'a lo grande'. Mismo menú, pero diferente forma de consumirlo. Y es que la organización ha pedido a los participantes que lleven su propio táper para dejar a un lado los platos y cubiertos de plástico. Además, para los olvidadizos habrá menaje biodegradable, que acabará en el contenedor marrón que Vargas estrenó hace menos de una semana.

2.000personas, entre jugadores y familiares, se espera que acudan el sábado a la quinta edición del Torneo Nacional de Balonmano Hierba en Vargas

La organización monta un bar y allí también se aplicará la filosofía de generar los mínimos residuos. Y es que toda la basura acumulada irá a parar al punto limpio que instalará la empresa pública MARE en Vargas para el sábado. La idea es contabilizar al finalizar la jornada los kilos de basura generados. La cifra servirá también para incluirla dentro del cálculo de la huella de carbono ocasionada durante la celebración del evento. Será de la mano de la Red Cántabra de Desarrollo Rural y para poder tener una idea más aproximada del impacto en el medioambiente se tendrán en cuenta aspectos como en qué medio de transporte han llegado los asistentes hasta Puente Viesgo. «Hemos animado a los equipos y sus familias a venir en autobús en vez de en coche particular. Tres clubes ya nos han confirmado que tomarán esta opción para reducir el impacto y esperamos que alguno más se una a esta iniciativa», cuenta a este periódico Óscar Villegas, alcalde de Puente Viesgo.

Y también habrá cambios en la forma de divertirse. En vez de los clásicos castillos hinchables, habrá talleres medioambientales impartidos por educadores de la mano del Centro de Investigación del Medio Ambiente (CIMA). Además, se instalará una 'zona de juegos sin pilas' donde se realizarán diferentes actividades y varios puntos de información para explicar el por qué de la filosofía de este evento. La certificación que se entregará con cada trofeo también está realizada con material reciclado y dentro de la economía circular.

El alcalde de Puente Viesgo explica que muchos de los clubes de otras comunidades les han trasladado la «fantástica idea» que supone desarrollar una jornada más sostenible. «Queremos ir a más, tenemos claro que tenemos que reducir el impacto en el medio ambiente cuando celebramos este tipo de eventos. Lo fácil sería meter toda la basura en una bolsa como siempre, pero se trata de dar pasos hacia adelante y asumir nuestra responsabilidad».

Y ya hay un nuevo reto para la edición del año que viene: conseguir que las camisetas que se reparten entre los participantes estén fabricadas con textil reciclado para cumplir con la normativa europea.