Delegación del Gobierno dice que los robos en valles pasiegos son un hecho «puntual»

El final del verano fue una mala época para varios municipios de los valles pasiegos. Robos con fuerza, allanamientos y hasta una agresión a un anciano causó la alarma en toda la zona. En Selaya, Villacarriedo, Villafufre, Saro o San Pedro de Romeral los vecinos dormían con un ojo abierto y, esto provocó una gran sensación de inseguridad porque no había día que no hubiese un delito. Tanto fue así que, en Selaya, se llegaron a organizar quedadas para organizar patrullas ciudadanas ante la falta de Guardia Civil y cuarteles abiertos. Todo esto se tradujo también en una recogida de firmas (más de un millar) que se trasladaron a Delegación del Gobierno en Cantabria para reclamar la reapertura de los cuarteles cerrados años atrás. La respuesta fue mandar a más agentes a la zona, incluida la caballería, un cuerpo especial de la Benemérita.

El pasado cinco de diciembre, la delegada del Gobierno en Cantabria, Eugenia Gómez de Diego, tenía a bien contestar a las inquietudes vecinales y a las mil firmas que le pedían reabrir los cuarteles cerrados y una presencia policial fija, que había ido desapareciendo en la zona años atrás. En la misiva, la responsable de los cuerpos de seguridad del Estado aseguraba que se había hecho un «análisis» de la evolución de la criminalidad. Que del mismo se sacaba la conclusión de que la delincuencia «convencional» había descendido «un 6,7» en el primer semestre de 2024. También añadía que los robos en el interior de la vivienda se habían reducido un «41,18%» con respecto al año 2023.

Acto seguido, Gómez de Diego admitía que, con carácter «puntual», en el mes de septiembre, si es verdad que se identifica «un incremento de robos. Atribuye a los mismos una especial incidencia en tres municipios concretos (Villacarriedo, Selaya y Villafufre). De estos robos afirma que tienen una «aparente relación de actividad delictiva itinerante y concentrada en el tiempo, con la concurrencia, al mismo tiempo con una delincuencia local», reflejaba.

Asimismo, la delegada del Gobierno resumía las medidas que se habían adoptado, que incluyó la detención de tres individuos, las dos primeras a finales de septiembre y un tercer hombre «a finales de noviembre».

Esas detenciones son fruto de «una mayor presencia policial» en esos municipios afectados, con la participación de las patrullas locales, una Unidad de Seguridad Ciudadana, el equipo de lucha contra Robos en el Campo (ROCA), además del grupo de caballería de la Agrupación de Reserva y Seguridad del Servicio Aéreo y la Agrupación de Tráfico. Medidas, las de la caballería y la del helicóptero que causó mucha expectación en toda la zona pasiega. A estas medidas, la delegada suma el diseño de un plan de prevención en la zona con charlas para evitar esos robos, además de aumentar las acciones de comunicación con las autoridades locales de los municipios afectados y asociaciones vecinales «siendo conscientes de la preocupación que producen en la ciudadanía, especialmente en las zonas rurales, este tipo de hechos puntuales», subraya.

Respecto al aumento de las patrullas fijas en la zona y la reapertura de los cuarteles que solicitan los vecinos de las zonas afectadas, no hay mucha o ninguna novedad. Gómez de Diego les traslada que desde 2018 se están «revertiendo los recortes en efectivos» en la región.

Los alcaldes de la zona confirman que parte de estas medidas si se han notado, pero no bajan la guardia. Al respecto, el alcalde de Villafufre, José Luis Cobo (PP), agradece «mucho» el trabajo de los agentes, en especial del equipo Roca. Del mismo modo, el alcalde de Villacarriedo, Ángel Sainz, se muestra contento y afirma que hay «mucha comunicación» con la Guardia Civil y la delegada. «Vienen mucho a ver a la gente mayor», afirma. Asimismo, el alcalde de Selaya, el popular Cándido Cobo ratifica ambas cosas, la mayor presencia policial, la mejor y más fluida comunicación con los agentes, pero asegura que, pese a ello, «los robos continúan».

Sin embargo, los vecinos de la zona que recogieron más de un millar de firmas para reclamar, entre otras medidas, el refuerzo de la vigilancia policial «permanente, no puntual» siguen pensando los mismo. La respuesta de la delegada no tranquiliza mucho a los afectados, dados los últimos robos que se han producido en la zona hace escasos días, uno de ellos un intento de entrada en domicilio y otro en el famoso restaurante Las Piscinas. Aseguran que la misiva de Gómez de Diego es lo mismo o una «copia» de lo que les trasladaron en una charla hace unas semanas los agentes, ante un público con familias afectadas y vecinos «indignados», a la que no acudió «ningún alcalde», citan. Además, apuntan a que los detenidos ya están «fuera».

La Guardia Civil de Cantabria ha instruido diligencias, en calidad de investigados, contra dos hombres como presuntos autores de delitos de hurto en el interior de cuatro vehículos en Lloreda de Cayón la misma noche. Los hechos sucedieron a finales de noviembre, cuando, gracias a la colaboración ciudadana, la Guardia Civil fue alertada de merodeadores.

Hasta el lugar se desplazaron efectivos de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil, que sorprendió a los implicados, quienes portaban diferentes efectos de los que no podían acreditar su legal procedencia, como tarjetas de crédito. Tras las indagaciones, los agentes determinaron que dichos efectos procedían de esos cuatro vehículos estacionados en Lloreda.

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