Borrar
El río Pas lucha por recuperar su antiguo esplendor

El río Pas lucha por recuperar su antiguo esplendor

Repoblación ·

El centro de alevinaje de Fuente Fría, en Vargas, soltará más de 30.000 alevines de trucha antes del próximo verano para repoblar de salmónidos la cuenca fluvial

NACHO CAVIA

Domingo, 15 de marzo 2020, 08:19

No deja de ser curioso que un antiguo lavadero sea el lugar elegido para recrear la magia de la vida a diario, un pequeño edificio en Vargas (Puente Viesgo) en el que miles de huevas de futuras truchas abren la puerta a la esperanza para el río Pas, para recuperar su antiguo esplendor, su rancio abolengo. Con la dosis extra de ilusión que da el amor a la naturaleza y al río junto al que has crecido, José María Gómez Oviedo, responsable de la Sociedad de Fomento de Caza y Pesca en el área de pesca, trabaja incansablemente por sacar adelante un proyecto ligado al Centro Ictiológico de Arredondo, del que se nutre de las huevas que eclosionarán en Vargas para convertirse en los alevines de trucha que poblarán el Pas a lo largo de la próxima primavera. Junto a Manuel Borbolla, presidente de la Sociedad de Fomento de Caza y Pesca, y el cooperador imprescindible, Jaime Pérez Zabaleta, luchan cada día por hacer realidad su sueño, que truchas y salmones no necesiten de proyectos como el suyo para reproducirse en su hábitat natural.

De momento, y ante el declive claro de los salmónidos, han puesto en marcha un plan a cinco años vista que prevé hacer viables un total de 34.141 huevas embrionadas de trucha a lo largo de cinco entregas. Mantienen con esfuerzo una unidad de alevinaje de truchas y salmones en el lavadero que suministra el manantial de Fuente Fría, un agua especialmente buena para sus propósitos.

La primera suelta en el Pas se ha hecho el pasado fin de semana y la satisfacción es patente entre los miembros del equipo. Entre 6.500 y 7.000 alevines han salido al campo de juego a hacerse valer. De los tres centímetros que miden en su estreno en el Pas pasarán, durante el verano, a unos cinco o seis y se espera que el año que viene sean ya visibles. En tres años serán adultos, maduros para la reproducción, el objetivo principal de proyecto.

En la unidad de alevinaje permanecerán aproximadamente dos meses de vida. «Recibimos las huevas embrionadas y contadas, están unos días en bandejas especiales», cedidas por la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación, como recordaba José María Gómez. Cuando eclosionan se pasan a piletas en las que, durante un mes, van tomando cuerpo. A partir de ahí había dos opciones. Una suelta al río, que es lo que se venía haciendo, o alimentarles, que al final es el camino por el que se ha optado siguiendo los consejos de expertos en el tema de Arredondo o Asturias. Todo apunta a que es mejor para que los alevines lleguen a su nuevo hábitat con más fuerza.

En la actualidad, además de las bandejas con huevas embrionadas, hay una pileta con peces nacidos hace una semana, una pileta con alevines que ya han empezado a comer y otra con los que llevan comiendo 20 días.

Pasados esos dos meses, cada 15 días una gran cantidad de alevines, ya formados, entrarán en contacto con su medio natural. En total, esperan poder soltar entre 24.000 y 28.000 alevines de trucha. A partir de ahí, probarán las mismas técnicas con huevas de salmón, también con el río Pas como destino.

Gómez Oviedo insistió en que el objetivo es aumentar la población de salmónidos en una cuenca en la que «veíamos que la especie iba en declive». Reconoce que «lo ideal» habría sido hacer primero un diagnóstico sobre el porqué de esa regresión de los salmónidos pero, «como a eso no hemos llegado, lo que hacemos es esto, implementar la población». Apunta, como factor más importante de la regresión, a la variación del medio, «cada vez hay menos agua y menos comida para los peces en los ríos».

Los promotores de la idea coinciden con el Ayuntamiento de Puente Viesgo y su alcalde, Óscar Villegas, en la importancia de la divulgación de ese proyecto entre los alumnos de los centros educativos de la cuenca del Pas-Pisueña. Dar a conocer la vida de los salmónidos en los ríos a niños que, como lamentaba José María Gómez Oviedo, ya no se acercan apenas a la ribera. Muy al contrario de lo que pasaba hace años, especialmente en su pueblo, Puente Viesgo.

Oscar Villegas, el alcalde de ese pueblo tan ligado al río Pas, asegura que «es uno de los proyectos que más ilusión me ha hecho y me hace, porque desde el primer momento me convenció. Un modelo de eficacia y eficiencia porque con muy poco dinero público se ha logrado este hito, todo un éxito», aseguraba. También estaba satisfecho con lo que ha sido la primera suelta de alevines en un afluente del Pas. Y concluyó afirmando que «solo puedo decir que el Ayuntamiento prestará su apoyo a cualquier proyecto medioambiental como este que nos presenten». La idea, dijo, «es ir mejorando estas instalaciones, aún en precario. Los promotores han hecho el acondicionamiento y nosotros hemos colaborado con la fontanería».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

eldiariomontanes El río Pas lucha por recuperar su antiguo esplendor