La Patrona de los pasiegos

Con la patrona de los pasiegos padecemos desde hace años una desacreditada mentira que, a fuerza de ser repetida, se está asumiendo como cierta y que implica de manera directa a las advocaciones marianas, a María Santísima representada en dos imágenes cargadas de historia y que, lejos de nombrarlas a una u otra como cabo o capitán general de los pasiegos, no hace sino confundir tanto a lectores como a devotos. Así encontramos numerosas páginas, tristemente cada vez más, donde a la Virgen del santuario de Valvanuz en localidad de Selaya se la presenta como la patrona de los pasiegos y cuando en realidad lo es del Valle de Carriedo, designada con tal advocación en el propio oratorio en el año 1947 y por la Iglesia, que es quien tiene competencia para ello; y localidad que, formando parte de la organización administrativa de este mismo valle desde la Edad Media, dentro del núcleo de la Merindad de las Asturias de Santillana y conformado por catorce concejos en 1495, continuó Selaya siendo uno de los cuatro términos municipales en los que se dividió el propio Valle de Carriedo cuando se constituyeron los ayuntamientos durante el Trienio Constitucional (1820-1823) y junto a Saro, Villafufre y Villacarriedo. Pero aún así algunos empecinados, en mayor medida implicados en actividades mercantiles, tratan de cambiar la historia y quitar a sus habitantes el orgullo de ser lo que son, carredanos. Quienes así se empeñan deberían saber que el término pasiego no es una marca comercial, es una identidad, como lo es la propia de carredano, torancés o trasmerano y, de seguir así y con esta terquedad, no es de extrañar que en pocos años y al paso que vamos hasta los históricos habitantes del Barrio Pesquero de Santander pasen a ser bautizados también como pasiegos.

Partiendo de que cada una de las Tres Villas Pasiegas tiene su propio patronazgo en las figuras de San Pedro, para la de San Pedro del Romeral, San Roque, para San Roque de Riomiera y Nuestra Señora de la Vega para la villa de Vega de Pas, respecto a quién es realmente la patrona que aúna a todos los pasiegos de estas tres villas ya la gran investigadora cántabra que fue Carmen González-Echegaray nos lo recordaba y reafirmaba años atrás: Así lo vemos en un escrito titulado Los Monteros de Espinosa, libro editado en el primer tercio del siglo XVIII en el que en un párrafo se dice: «Tienen la Villa y Cabildo tres feligresías o iglesias con sacramento y pila bautismal en los Montes de Pas y Rumiera, que distan cuatro leguas de Espinosa, las cuales erigieron y fundaron a sus expensas los vecinos y naturales de la misma Villa que habitan en aquellos sitios. Su advocación es Nuestra Señora de la Vega...» (Artículo de la revista Pasyegos Nº 2, noviembre de 1986. El libro a que se refería, «Los Monteros de Espinosa», obedece a una reimpresión perfeccionada y fechada en 1735).

Los pasiegos siempre han sentido una gran devoción por la Virgen de Valvanuz, a quien han ido a venerar desde hace muchísimos años a Selaya, histórica localidad del Valle de Carriedo con numerosos lazos de familiaridad, amistad y colaboración con ellos, como igualmente los pasiegos mantienen a su vez con toranceses o trasmeranos; y aunque hoy en día se engloben todos en el marco denominado como 'Valles Pasiegos', no olvidemos que esta es una marca registrada por la Mancomunidad de Valles Pasiegos en el año 2007 y por la Asociación para la Promoción y Desarrollo de los Valles Pasiegos en 2009, por lo que las designaciones geográficas y los gentilicios de los diversos valles que conforman esta denominada comarca, que no tiene entidad real porque nunca han existido los valles pasiegos y sí las Tres Villas Pasiegas, deben ser respetados por y para cada uno de ellos también.