

Secciones
Servicios
Destacamos
«Potabilizar el agua va directamente vinculado a la esperanza de vida y no cumplir con la legislación, a sabiendas, puede constituir un delito contra ... la salud pública». La dirección general de Salud Pública del gobierno de Cantabria salió ayer al paso de las declaraciones del alcalde de Luena, el regionalista José Ángel Ruiz, sobre el problema de salubridad de sus aguas y la publicación, hace unos días, de un bando advirtiendo a los vecinos de que el suministro no era «apto» para el consumo humano. El regionalista criticó entonces que Sanidad le obligue a instalar sistemas de cloración en sus 25 depósitos, aludiendo a falta de medios, defendiendo la calidad de su agua y poniendo de telón de fondo supuestos intereses económicos «de algunas empresas», restando importancia al aviso sanitario por la presencia de bacteria E.coli en sus aguas.
La directora de Salud Pública, Paloma Navas, contrarrestaba ayer el discurso de Ruiz que calificó de «excepcional y muy extraño». Navas quiso dejar claro que el caso de Luena «no es lo habitual» y que Cantabria cuenta con un agua «excepcional» con «todas las garantías» sanitarias. «Es un caso muy puntual que hace daño a nuestra imagen porque parece que es algo habitual y no lo es en absoluto», insistió.
Navas lamentó que el regidor se prodigue en un discurso de otro tiempo. «Beber agua sin garantía sanitaria no es un debate de este siglo» y tomar ese agua puede llegar a tener complicaciones de salud «graves» por ejemplo en personas con las defensas bajas o «con un sistema inmunitario vulnerable».
En Luena la unidad de vigilancia y control de las aguas ha encontrado contaminación por E.coli en «seis puntos de la red» y según Navas si esa bacteria se transforma puede haber complicaciones. «Si una bacteria cae en el agua y no lleva cloro, esta se reproduce y existe la posibilidad de que se multipliquen en tu cuerpo y causen una infección, que puede ser leve como una diarrea, pero también podemos tener un problema de salud grave», informó. «Mi dirección no puede quedarse sin hacer nada cuando unos vecinos tienen en riesgo su salud», sentenció
Por ello insistió en que su departamento hace lo que tiene que hacer: «asegurarse» de que las aguas tienen calidad. «Cuando no se potabilizaban las aguas, en España teníamos una esperanza de vida de 50 ó 60 años», recordó.
En Luena los vecinos no pagan el agua pero tampoco tienen un servicio acorde. Desde Sanidad se afirma que se ha ofrecido apoyo y que otras consejerías dan ayudas para los saneamientos, por lo que la inversión no es una excusa para cumplir la ley que responsabiliza del correcto suministro a los Ayuntamientos.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.