![Comienza el derribo del colegio Divina Pastora para construir nuevas viviendas](https://s2.ppllstatics.com/eldiariomontanes/www/pre2017/multimedia/noticias/201603/15/media/cortadas/Pastora--575x330.jpg)
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Juan Carlos Flores-Gispert
Martes, 15 de marzo 2016, 07:28
Las cuatro plantas del colegio de la Divina Pastora, en la céntrica calle de Santa Lucía, aún conservan algunos recuerdos de sus décadas de dedicación a la enseñanza. En lo que fueron la Secretaría y la Dirección, las monjas dejaron cartillas escolares con las calificaciones y las fotografías de las alumnas nacidas en el año 1956. También están los grandes libros con las calificaciones (por alumnos y cursos), álbumes desde los años cuarenta con fotos del devenir del centro y sus alumnos, libros de texto, volúmenes de la literatura universal y, tirado en un rincón, el pergamino con la fotografía y la firma autógrafa de Juan Pablo II emitido en julio de 1986 en el centenario de la muerte de la fundadora de la orden religiosa. Y, junto a ellos, decenas de pupitres y sillas escolares, muebles con aire de los años sesenta, antiguos equipos de música, decenas de cassettes (entre ellos el Cántico Espiritual, de Amancio Prada) y hasta un retrato de la madre fundadora presidiendo un aula con el lema en la pared 'Nos reunimos en el nombre de Jesús'.
Los restos del antiguo centro educativo conviven mudos con los obreros de la empresa cántabra Exfersan, que han iniciado la primera fase del derribo del edificio: la recuperación de elementos metálicos, desde los radiadores a los fluorescentes o los pasamanos. En los próximos días se iniciará la retirada de todo lo que sea madera, desde ventanas a puertas, tarimas y parte del antiguo salón de actos. Cuando ya no quede nada para recuperar, cuando el material escolar y el mobiliario se lo hayan llevado las ONG y la asociación protestante Nueva Vida, llegará el turno al derribo. En primer lugar, se realizará el corte con el edificio que linda con el colegio (calle de Pizarro) para que no sufra durante los trabajos que se harán tirando hacia lo que fue el patio de recreo todo el material de obra y hormigón, que será enviado a una empresa especializada (en Cantabria o Palencia, la que cobre menos) en el reciclaje de restos de obra. Los camiones sacarán el escombro desde el patio, por la calle de Santa Lucía. Y, cuando esto acabe, se iniciará la gran obra de excavación, puesto que se harán cuatro plantas de sótano.
Si se cumplen los plazos, el derribo del edificio se iniciará en las próximas semanas y durará mes y medio. En el otoño de 2018 los pisos y garajes serán entregados a los propietarios. La promoción, que desarrolla la empresa Tecniobras, supone una inversión de diez millones de euros, de los que cinco corresponden a la edificación. Se trata de 29 pisos y 110 garajes y un edificio de 750 metros cuadrados, lindando con la calle Pizarro, que se destinará al Ayuntamiento listo para ocupar por imperativo de cesión municipal. Se trata de una promoción libre y desde la constructora se asegura que el 80% ya está vendida. El precio de los pisos oscila entre los 166.000 y los 270.000 euros y el de los garajes, entre los 39.000 y los 56.000 euros.
La obra de la calle de Santa Lucía «dará trabajo de forma directa a unos 200 trabajadores, pero la influencia en la economía local y regional va mucho más allá, porque una vez entregados los pisos, sus propietarios tienen que montarlos y eso supone gasto en numerosas tiendas. Ningún sector tiene tanta incidencia en la economía como la construcción».
Los vecinos
En el suelo del patio del colegio está tirada la placa de metal que dedicó en 1984 'La Asociación de padres de alumnos en el centenario de la llegada de las RRMM franciscanas de la Madre del Divino Pastor en reconocimiento y gratitud de la gran labor de formación educativa y cristiana'. Hoy, a los vecinos de los edificios colindantes al antiguo colegio, (Pizarro y Gómez Oreña) les preocupa otro gran tema: cómo puede afectar a sus viviendas una excavación de tal calibre, porque desconocen cómo se hará y si el proyecto de ejecución para el derribo del edificio, y la realización de cuatro plantas de garajes, se ha presentado en el Ayuntamiento.
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Ana del Castillo
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