Secciones
Servicios
Destacamos
Violeta Santiago
Martes, 10 de mayo 2016, 21:58
Los cuatro vecinos de El Pilón y Prado San Roque que ayer comparecieron ante la comisión parlamentaria en la que se ha venido debatiendo sobre el derecho de realojo en el futura del Ley del Suelo arremetieron contra el Plan General de ... Ordenación Urbana (PGOU) de Santander, al que consideran «especulativo» y reclamaron que se apueste, en general, por rehabilitar barrios y no por «echarlos abajo». Una de las comparecientes, Virginia Velarde, portavoz de El Pilón, fue muy crítica con los diputados de la comisión, a los que vio «como cumpliendo un trámite. Nos han escuchado y han sido políticamente correctos, pero nadie se ha comprometido con nosotros».
La propia Velarde, primera en intervenir, lamentó que se les haya dado voz en el Parlamento «cuando ya ha pasado el periodo de enmiendas a la ley. ¿Qué sentido tiene esto ahora y, además, a puerta cerrada?», se preguntó. Todos los demás (María José García (también de El Pilón) y Luis Ángel Campo y José Luis García (de Prado San Roque) empezaron su declaración criticando justamente que estas se hayan convocado sin testigos, algo que calificaron al unísono de «burla a los ciudadanos» y de «atentado a la democracia». Todos lanzaron críticas muy parecidas antes de pedir al Ayuntamiento de Santander que empiece a mirar hacia Europa, donde se respeta el pasado de las ciudades.
Velarde incidió en el interés que puede haber para construir más viviendas cuando en Santander hay miles de pisos vacíos y censuró que se aprueben planes urbanísticos «que vulneran tanto los derechos de las personas. No encontramos justificación». Además, cuestionó que el Consistorio haga modificaciones puntuales del PGOU «en algunos casos, alegando que los cambios son de interés general», y se niegue a hacerlas en el suyo.
María José García instó a los diputados a «no mirar para otro lado» y a «no consentir este atropello» cuando evitar sus desalojos de su barrio de toda la vida (ella lleva en El Pilón 50 años) es solo cuestión «de voluntad política». Pero García, que señaló que todo este proceso le está costando una enfermedad, también teme «que todo el pescado esté vendido ya» y nos quieran echar con un justiprecio que «en realidad, debería llamarse antijustiprecio».
Los dos representantes de Prado San Roque lamentaron que el problema lo haya generado un PGOU «diseñado por cuatro para favorecer a cuatro» (Luis Ángel Campo) y «obsoleto y no adaptado a la realidad» (José Luis García). Este último cree que es muy necesaria una nueva Ley del Suelo «para que la gente no se encuentre indefensa ante las promotoras» y situó en la construcción del funicular del Río de la Pila el inicio de su problema. García relató que su barrio presentó un proyecto alternativo, de rehabilitación, al Ayuntamiento hace más de un año, pero no han obtenido respuesta.
Campo, por su parte, reclamó que los que «juegan al Monopoly» en Santander «respeten los derechos de los propietarios de Prado San Roque» que quieren seguir viviendo allí. Por fin, advirtió de que están siendo tantos los casos de damnificados por la política urbanística municipal «que tantos granitos de arena nos vamos a convertir en una duna».
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.