Los hosteleros críticos y la asociación firman la paz y salvan la Feria de Día

La mediación del Ayuntamiento ha sido fundamental para que las casetas de los hosteleros de la Feria de Día también se abran el próximo julio. Calmados los ánimos entre los críticos, que tienen 27 de las 57 casetas que se montarán, y la Asociación Empresarial de Hostelería (AEHC), y conseguidas parte de sus reivindicaciones, el sector se toma un respiro. Los críticos acudirán a la fiesta con la satisfacción de haber conseguido parte de sus reivindicaciones y que en el próximo año estarán en la comisión de organización que diseñará como será la Feria de Día del año 2017.

Los críticos quieren que se consigan mejores patrocinios para la Feria de Día de Santander. Aseguran que es posible, lo que redundará en obtener más dinero para mejorar toda la infraestructura, porque lo que desean de inmediato es cambiar las casetas y acabar con las actuales que imitan cabañas de madera. Desean poner otras instalaciones más dignas, con mostradores más anchos que permitan la colocación de vitrinas para exponer los pinchos tapados y ofrecer mejor seguridad alimentaria.

Los caseteros han mantenido durante días sus quejas y la amenaza de no acudir este año a la Feria de Día hasta que han conseguido que el año próximo se les tenga en cuenta.

También han logrado pagar 600 euros menos por cada caseta, de manera que han bajado de 2.932 a 2.359 euros para socios de la AEHC. El precio para los hosteleros no socios que deseen instalarse se mantiene en los 3.600 euros.

El descenso en los precios se ha conseguido recalcan los críticos gracias a la eliminación de varias partidas de gastos que les cobraba la asociación «a pesar de ser socios y que esa organización se financia con nuestras cuotas». Este año no habrá fiesta de presentación de las casetas en Las Carolinas y, por tanto, no será necesario abonar 2.500 euros como en anteriores ocasiones. Ni se pagará a la asociación 13.000 euros por organizar toda la Feria, sino solo 3.000. Y la publicidad de la fiesta se reduce de 29.000 a 19.000 euros.

Además, las actividades festivas impuestas por el Ayuntamiento en las calles donde hay instaladas casetas se reducirán y el gasto pasará de 25.000 a 20.000 euros, con el deseo de que desaparezcan el año próximo.

«Miramos por los negocios»

Los críticos agradecen al Ayuntamiento la buena disposición que ha tenido siempre para la celebración de la Feria y su labor para conseguir aunar posturas. Y criticaron a las juntas directivas de la asociación «que han organizado las fiestas porque han usado parte de los ingresos conseguidos en la Feria por pago de los caseteros y patrocinios, no para mejorar la feria y sí para cuadrar las malas cuentas de la asociación profesional que, como todas las demás, está sufriendo la crisis con descenso de ingresos», dijeron.

En la tarde de ayer, tras rubricar el acuerdo de paz, Luis Alberto Iturbe, del bar La Hermida, en nombre de los hosteleros díscolos, explicó que «no estamos bajo las órdenes de nadie. Solo miramos por nuestros negocios y por la calidad de la Feria de Día. El acuerdo se ha alcanzado después de que la asociación haya accedido a que estemos presentes en la organización del evento». Dieron «las gracias a todos los partidos políticos que se han interesado» por el conflicto y en especial a la concejal de Festejos, Carmen Ruiz , «porque su mediación ha sido fundamental».

Una vez que acabe la temporada de verano, «en septiembre, Hostelería nos dará a conocer las cuentas de la Feria de Día y comenzará el trabajo para organizar el evento de 2017», acabó Iturbe.