Secciones
Servicios
Destacamos
Juan Carlos Flores-Gispert
Jueves, 4 de agosto 2016, 07:47
Los hosteleros de Cañadío están muy preocupados por el botellón que cada fin de semana de buen tiempo, en especial en verano y con gran tamaño en la Semana Grande, invade ese espacio público. Como explicaron ayer en un comunicado «el peor enemigo de ... los vecinos y los hosteleros de Cañadío es el botellón. Como hosteleros entendemos que la imagen de la ciudad y, por tanto, su capacidad de atracción de visitantes queda muy comprometida por escenas como las que todos hemos podido observar en vivo o a través de los medios de comunicación»: suciedad, ruidos, bengalas, cánticos de madrugada, molestias para los vecinos y la plaza convertida en un gran urinario. Los hosteleros no quieren que «la oferta de ocio nocturna de Santander se convierta en un modelo turístico tipo Magaluf», la localidad de la isla de Mallorca que se ha hecho famosa en los últimos tiempos por el desmadre diurno y nocturno.
ver más
Los hosteleros acaban de unirse en asociación legal «con el objetivo de conservar este emblemático espacio de la ciudad como uno de sus principales atractivos turísticos, así como mejorar la convivencia entre vecinos, establecimientos de hosteleros y clientes». Forman esta asociación los locales La Calle, Bogart, Cañadío, Blues, Art 33, Cañadío, Canela y Ventilador. En trámite de asociarse están Lanchoa, Tía María, La Conveniente y La Columna. La discoteca Loft ha manifestado oficiosamente su interés por formar parte de la asociación, pero aún no ha iniciado trámite alguno, informó ayer la nueva organización profesional hostelera.
La asociación «ha recibido el compromiso del Ayuntamiento de Santander de actuar decididamente contra el botellón. Así nos lo han transmitido el alcalde y el concejal de Protección Ciudadana en una reciente reunión. Confiamos en sus palabras y en nuestra capacidad para colaborar con vecinos y autoridades a tal fin. Durante más de 35 años hemos evolucionado para ofrecer una imagen atractiva y seria de nuestra ciudad. Hemos invertido para mantener altos estándares de calidad y comodidad para nuestros clientes y hemos vuelto a invertir siempre que hemos entendido que era bueno para convivir de forma más armoniosa con nuestros vecinos», explican.
La asociación de hosteleros de Cañadío está segura de que «todos los implicados, autoridades locales, vecinos y hosteleros estamos concienciados y decididos a actuar para erradicar el botellón. Pueden contar con nosotros. Queremos vivir y queremos trabajar. Para eso debemos mantener un Cañadío alegre y jovial, pero limpio y ordenado, seguro y cómodo. Durante todo el año».
Porque son conscientes de que «el peor enemigo para los vecinos y los hosteleros de Cañadío es en la actualidad el botellón, una práctica ilegal que resulta especialmente grave durante la celebración de la Semana Grande. Como hosteleros queremos unirnos a vecinos y autoridades en la denuncia de los efectos negativos que produce este fenómeno. Ya no se trata sólo del descanso de los santanderinos o de la marcha de nuestros negocios, sino que entramos además en cuestiones de orden público, seguridad, y salubridad de las calles».
El lunes, el alcalde Íñigo de la Serna explicó que el Ayuntamiento va a «redoblar esfuerzos» para tratar de combatir el botellón en Cañadío y dejó claro que no se trata de incrementar la vigilancia policial, que es «muy difícil» controlar la presencia de jóvenes bebiendo en la calle y que se buscan fórmulas para impedirlo.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.