De paseo por la Copa de Vela

La primera jornada de casetas de la Copa del Mundo de Vela fue de remate de detalles y de apertura de instalaciones."Esperamos vender bien", dice Marta del Estal, al frente de la caseta de Marcos Mendivil, artesano joyero de Torrelavega. "Siempre que hay casetas en el muelle de Santander estamos. El diseño de las piezas es nuestro y todo son piedras naturales. Siempre nos ha ido bien, porque tenemos productos exclusivos y muchos clientes nos siguen. No tenemos competencia". Tiene piezas desde 25 euros, con piedras preciosas y semipreciosas, como topacios, ópalos, aguamarinas y malaquitas.

En las casetas se puede encontrar de casi todo, desde el orujo Justina de Liébana de la empresa cántabra Orulisa, hasta gafas, calzado, camisetas, helados, zumos, sombreros, alimentación, ropa de cama y artesanía de la localidad de Ubrique. Hay gastronomía del mundo, un pequeño Festival de las Naciones: comida argentina, francesa, australiana, griega, mexicana, argentina y brasileña. La empresa organizadora de ambos eventos es la misma.

En uno de los bares está Cristian Balbás, del restaurante El trébol, de Cueto (Santander). Es veterano en ferias y está seguro que "ésta va a tener una gran aceptación a poco que salga el sol y por la diversidad de productos y actuaciones que hay. La gente está deseosa de salir a la calle y de inaugurar la temporada de verano". Tiene tortillas, pasta, arroz salteado al momento, bocadillos, parrilladas de verdura y ensaladas variadas. Otro bar de cántabros es el de Neftalí Camus: "Ofrecemos patatas asadas rellenas de boloñesa o carbonara, sidra, costilla, chorizo a la sidra y pimientos de padrón".

Ildefonso Gómez ha acudido a la feria con su puesto Cannabis, la tienda de la santanderina calle de Guevara. "Es el tercer año aquí, y siempre nos ha ido bien. Tiene productos de plata y artesanía, realizadas en concha nautilus, dientes de tiburón o perlas". La pieza más barata cuesta 25 euros. Comparte carpa con Lucía Gutiérrez de El baúl de la abuela, también de la calle de Guevara. "En las dos anteriores veces que he estado en esta feria al borde del mar las ventas fueron buenas". Vende textil, camisones (39 euros), cortinas (19) o tapetes (3 euros).

Los participantes en la feria de la Copa del Mundo están expectantes. "Dependemos del buen tiempo, porque hay que pagar la carpa y sacar un beneficio", dicen. Una carpa de 25 metros para tiendas cuesta 1.650 euros. Y una carpa con la terraza para un bar, 3.900 euros.

Otro de los hosteleros santanderinos en esta instalación efímera es el restaurante y catering Como en casa. "Es una gran oportunidad para darnos a conocer. Desde hace un año tenemos el restaurante en la calle de Fernández de Isla. En esta feria tendremos siete empleados, a turnos", explica María Villalba. Veronika, salud y belleza es la tienda de la barcelonesa Verónica Montenegro. Tiene todo lo relacionado con productos naturales. "Venimos hace años a ferias de Cantabria y el público ya nos conoce". Su producto estrella es el aloe-confort contra el dolor muscular (17 euros). Y, cerca, está el puesto de productos de Cantabria de Miguel Ángel Celador. Anchoas, ventresca, mejillones, cervezas, sobaos quesadas, quesos, legumbres, orujo y pan de Potes.

Programa de actividades

La feria está amenizada cada día por actuaciones en Gamazo. La mañana de este sábado estará dedicada a los niños y por la tarde habrá música con dj y pantalla gigante para ver el partido Real Madrid-Juventus. El domingo, será la inauguración oficial de la Copa del Mundo de vela. Toda la mañana estará dedicada a actividades infantiles, a las seis y media de la tarde actuará el mago Raúl Alegría; a las siete de la tarde Anne Igartiburu y Jesús Mazón presentarán la ceremonia; a las 20.30 actuará Celtas Cortos y a las 22.30 habrá espectáculo pirotécnico y música de fin de fiesta.