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Uno de los cuatro torreones de esquina del antiguo Banco Mercantil de Hernán Cortés quedó anoche suspendido en el aire por una grúa de gran tonelaje y acabó tomando tierra para permitir que puedan avanzar las obras de rehabilitación del edificio -una transformación que ... va ligada al proyecto Pereda-. No es un adiós definitivo. Es un hasta pronto. Hasta que el edificio, que albergará la oficina principal de particulares, banca de empresas, banca privada y la dirección territorial del Banco Santander, termine sus obras de acondicionamiento.
El proyecto de intervención, a cargo de Cruz y Ortiz Arquitectos, prioriza la recuperación de aquellos elementos de interés arquitectónico del edificio, tomando como referencia el proyecto original, que data de 1900. De ahí el descenso con sumo cuidado de los elementos más singulares de la fachada. Se lleva a cabo en distintas fases. Comenzó ayer martes con la retirada de una de las dos cúpulas ubicadas en la fachada Sur. La otra se bajará mañana. Los trabajos, que procuran interrumpir lo menos posible la circulación, se desarrollan en horario nocturno, de manera que el posicionamiento de la grúa en el interior del recinto y el resto de maniobras se han programado fuera de los horarios de máxima presencia de personas. De la misma forma y con los mismos horarios -las noches del 23 al 24 y del 30 al 31 de agosto- se bajarán los otros dos torreones, los ubicados en la esquina noreste y noroeste.
El descenso de los torreones no es baladí. Para permitir su izado y posterior bajada, se ha diseñado una subestructura metálica auxiliar a modo de esqueleto, que aporta seguridad y estabilidad a las maniobras. Y antes de bajar las cuatro cúpulas, se han realizado inspecciones en el entramado de madera y el revestimiento de zinc de cada una de ellas para comprobar su estado de conservación y determinar el refuerzo necesario en su interior.
Una vez retirados los cuatro torreones, se procederá a su estacionamiento en el propio recinto de la obra, sobre espacios acondicionados y convenientemente anclados mientras continúen los trabajos de consolidación del edificio. Durante ese tiempo, se realizará su restauración en condiciones óptimas de seguridad y accesibilidad, buscando la recuperación integral y fiel de dichos elementos. Después, cuando terminen las obras de acondicionamiento del edificio, volverán al lugar en el que han estado desde 1900 (obra de Casimiro Pérez de la Riva).
A la sombra del Proyecto Pereda, esa gran obra de transformación del edificio que alberga las oficinas centrales del Banco Santander para su conversión en un espacio expositivo, la reforma del antiguo Banco Mercantil (también antiguo Banesto) resulta fundamental para su realización, puesto que allí se trasladará la nueva sede territorial del banco.
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