Las asociaciones y el Festival de las Naciones ultiman los detalles de la jaima gastronómica

Laura Fonquernie

Santander

Miércoles, 10 de agosto 2022, 07:15

Comenta

La dirección del Festival Intercultural de las Naciones y la Federación de Asociaciones de Extranjeros Residentes en Cantabria (Faercan) ultiman los detalles del acuerdo que permitirá a las agrupaciones contar con una jaima gastronómica en el interior del recinto que se ubicará en los Campos de Sport de El Sardinero. Había dudas sobre el estand de comida y la «voluntad» de negociación parece que finalmente llegará a buen puerto. Ocurre que este año, tras el paso de la crisis sanitaria del covid, se han endurecido las reglas para atender un estand de comida en el que se manipulan alimentos. Por eso el festival pedía a los colectivos que «se ajustaran a la normativa vigente», explicaba esta semana Sergio Frenkel, director del festival que, insistía, en que «todas las asociaciones tienen la puerta abierta para participar». No obstante, para vender comida como en pasadas ediciones las personas debían ser «profesionales», hace falta dar de alta a los trabajadores y contratar un seguro de responsabilidad civil. Con estos requisitos cumplidos, la jaima de gastronomía podía ponerse en marcha.

Entre los puntos que incluye el acuerdo -pendiente de confirmarse- está también el coste de la caseta. Ajustarse a la normativa supondrá para los colectivos un «esfuerzo» que se traducirá en un gasto «excepcional por poder cumplir la legalidad», añade Frenkel. Y por eso ambas partes han decidido que, en caso de cerrarse el acuerdo, «este año no se les cobrará la jaima» por ocupar el espacio. Así, las asociaciones y ONG participarían en la XV edición del Festival de las Naciones con las 15 casetas gratuitas en las que las plataformas se turnarán para vender su artesanía local. Y, además, estarán presentes con una jaima de comida que ha sido el foco de la polémica esta semana. Así quedarían resueltas las dudas y la polémica que ha rodeado el regreso del Festival a Santander tras dos año de parón.