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Asproán, la protectora con sede en San Román y más de 50 años de vida que hace unos meses resultó ganadora del concurso municipal para desempeñar el servicio de recogida de animales vagabundos, tendrá que esperar al menos un año para obtener la concesión. Pese ... a haber superado en puntuación a la actual concesionaria, Cecapa, según la evaluación realizada por los funcionarios municipales la protectora no podrá obtener la subvención municipal que habilita para el servicio porque ha tenido problemas con la documentación que el Ayuntamiento de Santander requiere para formalizar el contrato.
«Hace mucho que funcionamos como protectora y tenemos muchos socios y el apoyo del Ayuntamiento, pero este año, que nos hemos presentado para obtener el servicio oficial de recogida, nos hemos dado cuenta de que necesitamos actualizar documentación que precisamos para ello», cuenta Eduardo Puertas, máximo responsable de esta entidad sin ánimo de lucro que da cobijo a más de 300 perros sin hogar.
Asproán se presentó este año para arrebatar el servicio a Cecapa, actual concesionaria, y que tiene su sede en Parayas. En una evaluación pormenorizada, en la que se tienen en cuenta las instalaciones, el equipo de profesionales y los servicios veterinarios, entre otros aspectos, Asproán obtuvo 88 puntos, muy por encima de los 48 logrados por Cecapa. Pero la protectora de San Román no podrá obtener la subvención del Ayuntamiento -que son más de 280.000 euros para dos años-, por problemas «con los papeles».
Lo acreditó el propio Consistorio el pasado 24 de agosto. En su portal de contratación, el Consistorio publicó el acta en el que detalla que «Asproán Asociación Protectora de Animales presenta un escrito en el que manifiesta que no renuncia a la adjudicación pero que no puede aportar la totalidad de la documentación exigida en los pliegos de las Cláusulas Administrativas Particulares que rigen el procedimiento». El documento aclara que por esta causa Cecapa Cantabria SL, el licitador siguiente, continuará desempeñando las labores de perrera municipal.
En Asproán ya están trabajando en la subsanación del problema. «Hay documentos muy antiguos, de cuando esto comenzó a andar, que necesitan una revisión, una actualización», asegura Puertas. Y el problema es que esa actualización necesita un tiempo, no puede formalizarse de la noche a la mañana. «Estamos en conversaciones con el Ayuntamiento para subsanar los pequeños problemas que vayan surgiendo para que el año próximo podamos volver a concursar y obtener definitivamente el servicio».
Entre tanto, tendrán tiempo para mejorar algunos puntos que son esenciales para tal fin. «En la actualidad contamos con un veterinario que se traslada a nuestras instalaciones para atender a los animales, pero en nuestro proyecto ya estaba incluida la idea de montar una clínica veterinaria en la propia protectora. Es algo que hemos estado barajando desde hace mucho tiempo y que puede ser muy bueno tanto para los animales que tenemos aquí como para cualquiera que quiera venir, porque no tendrá ánimo de lucro y será más barata que una clínica normal», detalla Puertas.
Actualmente Asproán tiene más de 1.000 socios que pagan una cuota de 10 euros mensuales. Con ello se ganan el derecho a pasear al perro apadrinado y ese mismo dinero sirve también para comprar medicinas, para modernizar instalaciones y para adquirir kilos y kilos de pienso. «El dinero de la subvención serviría, sobre todo, para contratar a personas que puedan hacerse cargo de esto con una mayor profesionalidad, porque a día de hoy somos todos voluntarios y el servicio que damos al público es el que podemos».
Asproán abre sus puertas todos los sábados de once de la mañana a seis de la tarde. Todos los socios pueden acudir a sus instalaciones para pasear a sus perros apadrinados y todo aquel que esté interesado en adoptar puede presentarse allí para hablar con los responsables y obtener consejo. «Lo que pretendemos con la licitación es tener más recursos para hacer un trabajo que en cierta medida ya llevamos tiempo haciendo», asegura Puertas.
Con la nueva ley de protección y derechos de los animales queda prohibido matar mascotas sin justificación, un acto que acarreará multas de 100.000 a 600.000 euros. «Este es uno de los motivos por los que dimos el paso de presentarnos. Ya que el 50% de los perros que nosotros cogemos todos los años proceden de perreras como la de Parayas, Centro Canino Besaya, y en menor medida La Valleja (Liencres)», argumenta Puertas.
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