El Ayuntamiento aprobará el lunes el dinero para la polémica reforma del pabellón del Marqués de Estella

El Ayuntamiento de Santander ha anunciado que el lunes la Junta de Gobierno Local aprobará el proyecto de las obras para mejorar el pabellón, con una inversión de 573.211 euros, casi 172.300 euros más que lo estipulado en un primer momento.

La alcaldesa de la ciudad, Gema Igual, que se reunió hace mes y medio con la dirección y la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) del centro, ha recordado que en aquel encuentro se comprometió a solucionar los problemas del pabellón deportivo y optimizar sus instalaciones y servicios: «Ha pasado poco más de un mes, con un periodo de fiestas incluido entre medias, y el Ayuntamiento ya tiene sobre la mesa el proyecto que dará solución a esas deficiencias y permitirá que los 480 alumnos del Marqués de Estella dispongan de unas instalaciones deportivas idóneas en el plazo de tiempo más breve posible», ha remarcado.

Igual ha indicado también que el Ayuntamiento ya ha informado a la dirección del colegio sobre la tramitación del proyecto, que prevé la rehabilitación y mejora global del pabellón, con la reparación de todas las deficiencias detectadas. Así, se contemplan obras de restauración de la cubierta, así como actuaciones de mejora de la cancha, vestuarios y aseos.

La alcaldesa ha detallado que, una vez que este lunes, 15 de enero, se apruebe el proyecto en la Junta de Gobierno Local, se iniciará la fase de contratación para que, «en el menor periodo de tiempo posible», queden aprobados los pliegos y las obras salgan a licitación.

La aprobación llega después de 14 años de demandas, pero que cobraron especial fuerza el pasado noviembre cuando este periódico recibió 50 cartas de los alumnos del centro escolar solicitando ayuda para que el Ayuntamiento reparara su pabellón. «No podemos dar clase porque cuando llueve nuestro profesor de Educación Física pone cubos para que no nos caigamos», «Un día de estos habrá un accidente bastante grave», «El techo está roto y rasgado y es por ahí por donde entra el agua. Hay humedad que se cuela por las paredes... ¡En cualquier momento se nos cae el pabellón encima!», decían los menores en las misivas que recibió el director de El Diario Montañés, Iñigo Noriega.

Después de las cartas fueron los padres los que tomaron la palabra. La AMPA del centro convocó a todos los padres del colegio para, cada mañana, llevar a cabo manifestaciones dentro del pabellón hasta que la alcaldesa atendiera sus reivindicaciones. Durante siete días, el centro estuvo en el punto de mira por la trascendencia mediática que alcanzó el asunto y las declaraciones cruzadas entre la Asociación de Madres y Padres de Alumnos y la alcaldesa que, inicialmente, aseguró desconocer que los alumnos y profesores utilizaban cubos para recoger el agua de la lluvia y evitar resbalones durante sus clases de Educación Física. Finalmente, tras distintas acciones para visibilizar el deteriorado estado del pabellón y la urgencia de su arreglo, la regidora aceptó la solicitud de reunión por parte de las familias y el equipo directivo del colegio.