El Ayuntamiento dio en 2020 numerosos pasos para sacar adelante la futura obra

Los responsables de los servicios municipales correspondientes informaron en positivo todos los trámites preceptivos para llevar adelante la obra. Es decir, todo lo que tiene que ver con su justificación, los planos, su ajuste al Plan General de Ordenación Urbana, el presupuesto que se precisa y el denominado pliego de prescripciones técnicas particulares.

Desde junio de 2020, el proyecto tiene el visto bueno municipal en todo lo que se refiere a la necesidad de abordar una 'obra completa', tiene redactado el plan de los trabajos con sus respectivas medidas de seguridad, está hecho el estudio geotécnico de los terrenos sobre los que se va a ejecutar la obra y se han examinado los planos que la afectarán, caso del de ocupación de terrenos y restinción de servidumbres. También se tenía claro ya en ese momento que el proyecto está en línea con el PGOU.

Pero, de momento, no se han dado plazos para que el proyecto pase de los documentos a convertirse en una realidad. Las únicas declaraciones oficiales se han centrado en defender que «se está trabajando» en las modificaciones que sean precisas.