El Ayuntamiento reconoce su «preocupación» por Isabel II y estudia un plan integral de actuación

Una realidad que no pasa desapercibida para el Consistorio. «Tanto en Isabel II como en otros lugares de la ciudad donde se dan situaciones parecidas, se viene actuando especialmente desde el área de Servicios Sociales, pero también desde la Concejalía de Seguridad Ciudadana, Barrios, Limpieza o Comercio». De hecho, según explican, existe un protocolo específico para la retirada de la acumulación de basura para estos casos. «También se refuerza la presencia policial o se trabaja para poder dar con los propietarios de los locales de cara a evitar este tipo de circunstancias», añaden. Precisamente la implicación de los propietarios de los locales es «imprescindible» para que estos espacios «se encuentren en perfecto estado, como es su obligación», añaden.

La creciente inseguridad de la calle se explica, según los vecinos, por la llegada de personas sin hogar a la zona que se resguardan en los locales vacíos para dormir. En este sentido, la Corporación municipal se refiere al centro de acogida Princesa Letizia, que a través del programa Ola de Frío -trabaja con todas las personas que duermen a la intemperie en todo el término municipal- «lleva tiempo interviniendo con estas personas, que están perfectamente identificadas y responden a casuísticas diversas». Así, recientemente se han modificado aspectos y rutinas del programa para intentar «maximizar» las posibilidades de traslado al centro de acogida.

Según los datos que maneja el Ayuntamiento, entre octubre de 2022 y octubre de 2023, Ola de Frío ha conseguido en 124 ocasiones derivar a quienes duermen en la calle al Princesa Letizia. «Lamentablemente no siempre es posible y existen muchas dificultades para convencer a estos ciudadanos y que se retiren de donde se encuentran, más si cabe en este caso, al tratarse de locales que son propiedad privada».

Además de este programa, el Consistorio cuenta con un grupo de trabajo en torno al «sinhogarismo» para avanzar en medidas que «permitan reducir estas situaciones y mejorar la atención en cada caso». Así, al inicio de la legislatura, se celebró una reunión de técnicos para proponer nuevas medidas y se incrementó la periodicidad de los encuentros, «que ahora se llevan a cabo mensualmente».

Los que criticaron con dureza al equipo de gobierno municipal fueron los grupos de la oposición. Para Daniel Fernández, portavoz socialista, lo que ocurre con Isabel II es «otro ejemplo más del fracaso de las políticas del PP en el diseño de la ciudad». A su juicio, la reforma de la calle «supuso otra gran inversión económica que no ha implicado una mejora para los comercios ni un atractivo para los peatones». Y compara la situación con la de Juan de Herrera, una de las calles comerciales de la ciudad por excelencia: «Tuvo infinidad de críticas y ahora es la zona más atractiva para los comercios».

Laura Velasco, portavoz de Vox, explica el «declive» de la calle debido al «abandono y la desidia» del equipo de gobierno municipal. Velasco también lamenta el «clima de inseguridad» que se está generando: «Es necesario que se aumente la presencia policial en esta zona de la ciudad para evitar reyertas».

En la misma línea se encuentra el regionalista Felipe Piña, para quien la situación de Isabel II no es un hecho aislado «si se compara con el resto de calles comerciales de la ciudad». Para Piña, la mayor prueba de ello es que, en los últimos cinco años, han cerrado «aproximadamente 700 locales comerciales».

Por último, Keruin P. Martínez, portavoz de IU-Podemos, entiende que lo que ocurre en esta zona «es solo parte de una extensión del plano general de Santander, que mucha gente piensa que se limita a la periferia, pero que lleva años extendiéndose también por el centro. Es el caso del Cabildo o Vista Alegre».

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