Secciones
Servicios
Destacamos
El Centro de Atención a la Dependencia (CAD) de Cueto en Santander, que en un futuro albergará una nueva unidad especializada en pacientes con esclerosis lateral amiotrófica (ELA), con capacidad para cinco personas, cuenta ya, desde hace una semana y media, con un residente con ... ELA en fase muy avanzada. El proyecto ha tenido que empezar de una forma «un poco atropellada», explica Fernando Martín Pérez, presidente de ConELA (Confederación española de entidades de ELA) y cabeza visible de la Asociación CanELA.
El primer paciente con ELA que ya reside en Cueto es Joaquín Mendoza, barcelonés de nacimiento y cántabro de adopción (63 años), a quien entrevistó este periódico el año pasado. A Joaquín, que vivía por aquel entonces en la residencia de Quijas, hace unos meses los médicos le pusieron delante las dos opciones que le quedaban: someterse a una traqueostomía o sedación y muerte. «El decidió seguir viviendo», dice Martín. Y por eso hace una semana y media Joaquín fue ingresado en el CAD. «Los cuidadores de Cueto están acostumbrados a cuidar a personas con movilidad reducida y de gente mayor, pero tratar a un enfermo de ELA al que se ha realizado una traqueostomía es algo bastante más especializado, por lo que ahora le están tratando muy bien, pero con mucho miedo a equivocarse o no hacer bien algo», explica el presidente de la asociación CanELA. Y es que el cuidador de un enfermo con esta patología tan devastadora debe familiarizarse con la limpieza diaria del estoma, con el cambio de la cánula si el modelo así lo requiere, con el funcionamiento normal del ventilador y con el reconocimiento de las alarmas. Y todos esos cuidados se suman a los que ya precisa Joaquín Mendoza, que tiene una sonda de gastrostomía y ya no tiene movilidad (habla a través de un ordenador que maneja con sus ojos).
Habrá más pacientes de ELA en un futuro próximo en la residencia de Cueto, o al menos eso han asegurado este martes el vicepresidente y la consejera de Servicios Sociales del Gobierno de Cantabria, Pablo Zuloaga y Eugenia Gómez de Diego, respectivamente, en una visita al CAD. A pesar de que el proyecto de esta unidad todavía está en fase de redacción, desde el Gobierno de Cantabria afirman que las obras para cambiar algunas partes del centro y acondicionarlas a las necesidades de los residentes con ELA «empezarán a finales de año».
Actualmente, hay 55 personas diagnosticadas de esclerosis lateral amiotrófica en Cantabria, una patología que no tiene cura y cuyos pacientes viven de media entre 3 a 6 años. Se trata de una enfermedad neurodegenerativa del sistema nervioso y va incapacitando de forma progresiva –daña las neuronas motoras del cerebro y la médula espinal hasta que dejan de enviar mensajes a los músculos-. El cuerpo se va desmoronando, se pierde la capacidad de hablar y comer. La cascada de complicaciones de la ELA no tiene freno y por ahora tampoco hay tratamiento que ralentice su progresión. Eso sí, las capacidades intelectuales se mantienen intactas hasta el último momento. La parte más cruel de la enfermedad.
La unidad en Cueto está destinada, sobre todo, para las personas que ya están en una fase avanzada de la enfermedad y que además no disponen de una red de apoyo para afrontar sus cuidados. «Estas cinco plazas que se van crear en el CAD de Cueto se irán dando a pacientes que cumplen los requisitos anteriores y que así lo soliciten». De lo que se encargará ahora la Asociación CanELA es de «preparar a los trabajadores que ya están atendiendo a Joaquín Mendoza y a los que atenderán a los futuros residentes con ELA», explica Martín, quien avanza que la residencia de Cueto necesitará «más personal» para cuidar a los futuros residentes de esa unidad.
El CAD de Cueto, que dirige Inmaculada Gálvez, cuenta con 199 residentes, personas en situación de dependencia y otros con autonomía. Las instalaciones de este centro, que depende directamente del Instituto Cántabro de Servicios Sociales (ICASS) se han ido remodelando a lo largo de los años para dar mejor calidad asistencial. Las personas dependientes ocupan en su mayor parte habitaciones individuales y cada pabellón está dotado con todos los servicios como son sala de estar, comedor. También dispone de cocina, servicio de comedor, cafetería, salón de actos, biblioteca, jardín y tanatorio, además de taller de mantenimiento, lavandería y vestuarios para el personal.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.