Las cámaras captan a dos personas minutos antes del incendio del garaje de El Alisal

«Ojalá les pillen porque fíjate la gracia que nos han hecho esos malnacidos», comentan en la plaza que se encuentra justo encima de la zona donde las llamas llegaron a alcanzar más de 900 grados. Los investigadores han recabado imágenes de distintas cámaras de seguridad que estaban repartidas por el subterráneo y que, dependiendo del punto de vista, pueden ayudar a identificar a los presuntos autores del incendio que terminó por afectar a ochenta vehículos.

Todavía ayer algunos vecinos continuaban sacando los coches que están en mejores condiciones. «No quiere decir que estén bien, pero por lo menos no están convertidos en hierros y plástico derretido», explica otro residente. La zona más afectada se preservará todavía durante unos días con el precinto de la Policía para que los peritos de los seguros realicen su trabajo. Unas labores que se prolongarán durante esta semana. En todo caso, el administrador ya avisó el primer día de que el garaje cuenta con un seguro de responsabilidad civil y habrá que esperar a conocer la causa del fuego para saber si cubrirá o no los daños de los vehículos.

La intención, según el administrador, es que el garaje esté limpio y listo para usarse en los próximos días. Para ello ya ha avisado en una circular de que se van a asegurar las bombas de drenaje del edificio para evitar inundaciones y que se conectarán varias «mangueras de chorreo de paredes y techos» a las bocas de incendios del exterior. La limpieza «se comenzará de sur a norte», al tiempo que se recogerán los escombros del suelo, sobre todo fruto de las bovedillas de hormigón deterioradas por el daño causado por las altas temperaturas.

Las quejas de los vecinos se repiten cada día al hablar sobre este asunto porque son muchos los partidarios de precintar el aparcamiento antes de que vuelva a estar en uso. «Es peligroso, no me atrevo a que esto vuelva a suceder porque al fin y al cabo vivimos arriba y esta vez no le ha pasado nada a nadie; pero si vuelve a incendiarse, quizá lamentemos pérdidas humanas, porque esta vez hemos estado cerca de intoxicarnos con el humo», advierte una vecina, una de tantas que han acordado exigir al Ayuntamiento de Santander el precinto del espacio hasta que se acometa una reparación, para la que pedirán presupuestos en los próximos días.