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El Gobierno regional anunció a mediados de marzo que redactaría una nueva Ley del Juego más restrictiva que la actual. Aunque a principios de año se habían realizado algunas modificaciones sobre la normativa vigente, de 2006, no resultaron suficientes para muchos colectivos y ayuntamientos. Por ello, el Ejecutivo decidió hace un mes empezar de cero y, mientras tanto, suspender las aperturas de nuevas casas de apuestas. Esta decisión se plasmó este jueves en el Boletín Oficial de Cantabria (BOC) y desde el Ayuntamiento de Santander celebran que se tuvieran en cuenta sus alegaciones, que afectan directamente al avance de las dos salas proyectadas en Cazoña que habían provocado el malestar entre muchos vecinos del barrio.
Las nuevas medidas que se recogerán en la nueva Ley -que se desconoce cuándo entrará en vigor- implican «ir más allá» y establecer una modificación integral del sector ante la «preocupación generada por la expansión del sector del juego», expuso la consejera de Presidencia, Paula Fernández, cuando anunció que se redactaría una nueva norma. Entre los cambios, avanzó que se establecerá un número máximo de salones en la región y se endurecerán la publicidad y el régimen sancionador. El cambio legal se llevará a cabo desde el «consenso y el diálogo» con la constitución de una mesa de trabajo en la que participarán los ámbitos implicados, desde los operadores de juego y empleados del sector como vecinos, padres, madres y jóvenes.
La consejera también apuntó que se establecerá un régimen de caducidad de los estudios de viabilidad necesarios para la concesión de las licencias de apertura y la aplicación efectiva de la distancia mínima de 500 metros a los centros escolares. En la resolución publicada este jueves se especifica que, si en nueve meses no entra en vigor la nueva ley, «se efectuará una evaluación de la oferta de juego existente para determinar la necesidad de adopción de un nuevo acuerdo».
Desde el Ayuntamiento de Santander celebran esta modificación integral de la Ley del Juego anunciada por el Gobierno regional y valoran positivamente que se incluyan las alegaciones que presentaron a principios de marzo. Una de las peticiones incluidas en ese documento, y que Fernández confirmó que llevará a cabo, es la de abrir una moratoria que impida otorgar nuevas autorizaciones.
En el texto, el Consistorio recordó que los Ayuntamientos sólo intervienen residualmente en los asuntos del juego, mediante el otorgamiento de licencias de obra y apertura. Cuando se redacte la nueva ley, el Consistorio y el resto de colectivos involucrados deberán volver a presentar alegaciones si detectan que el nuevo texto no cumple con todos los requisitos que consideran necesarios.
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