La cárcel de Santa María Egipciaca reaparece ocho décadas después
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El edificio, localizado en la plaza Juan José Ruano, se ha encontrado al ejecutar la obra del ascensor para unir el Cabildo de Arriba con Jesús de MonasterioSus más de 200 años de historia se dividieron entre albergar una casa de recogidas y una cárcel. Allí se hospedaron mujeres con escasos recursos, delincuentes, mendigas y prostitutas. Como prisión, acogió arrestos disciplinarios en el siglo XIX y presos deportados de Cuba a ... escasos años del siglo XX. En 1934 albergó a los condenados por la revolución que se produjo en varias industrias de la provincia. Dos años después, el edificio se derribó y la actividad penitenciaria se trasladó a la Prisión Provincial -desaparecida también en 2010-. La historia de la cárcel de Santa María Egipciaca quedó enterrada como las piedras que formaban sus cimientos y que ahora, más de 80 años después, han reaparecido.
El proyecto municipal para unir El Cabildo de Arriba y Jesús de Monasterio a través de un ascensor ha sido el detonante para que esta antigua prisión resurja tras décadas de olvido. Durante la ejecución de las obras aparecieron restos de sus muros, que obligaron a retrasar las intervenciones para evaluarlos. Ahora, el Ayuntamiento ha modificado el proyecto para añadir una reproducción de los hallazgos en la plaza Juan José Ruano y unos paneles informativos con la historia de la cárcel. «Los restos del edificio de Santa María Egipciaca constituyen un elemento más de lo que fue el antiguo Cabildo de Arriba de la ciudad, en donde convivió con otras construcciones emblemáticas como la iglesia de Nuestra Señora de la Consolación, el Hospital de San Rafael -actual sede del Parlamento- o los restos de las estructuras defensivas de la primera guerra carlista», enumera el concejal de Fomento, César Díaz.
La casa de recogidas y después cárcel de Santa María Egipciaca fue fundada a finales del siglo XVIII por Rafael Tomás Menéndez de Luarca para acoger a mujeres que atravesaban situaciones difíciles. De su proyecto, además de los muros encontrados, sólo queda un esbozo de escudo de su puño y letra que presidía la entrada del edificio y donde puede leerse: 'Pan aquí a la que trabaja, y a la que no, paja, paja'.
Tenía una planta triangular con fachada al sur, hacia la calle de su mismo nombre, y contaba con tres plantas, bajo cubierta y un patio central. Todo el edificio estaba rodeado por un alto tapial de piedra del que todavía se pueden apreciar algunos restos entre el jardín y el arbolado de la plaza Juan José Ruano. Menéndez de Luarca también participó en la fundación del Hospital de San Rafael. ¿Y en qué consistía exactamente una casa de recogidas? Este tipo de instituciones tuvieron una enorme trascendencia social y fueron centros de reclusión para mujeres con pocos recursos, que vivían en la mendicidad o se dedicaban a la prostitución. El fin de estas casas era servir como correccional o reformatorio y pretendían 'regenerar' a estas mujeres por medio del trabajo y la oración, con una férrea disciplina. Las recluidas, aparte de tareas domésticas, realizaban otras labores y vendían los productos que fabricaban para costear parte de su sustento, vestuario y necesidades.
De casa de recogidas pasó a convertirse en una cárcel. En la segunda década del siglo XIX el edificio modificó su actividad y sirvió como prisión durante más de cien años, hasta su derribo en 1936. Como refleja la imagen de una de las celdas, las condiciones en su interior eran de miseria. La suciedad se acumulaba en el suelo y en los muebles y la humedad ennegrecía las paredes.
Entre sus inquilinos figuraron en 1879 sesenta y seis presos deportados de Cuba por su participación en la guerra de los Diez Años, la primera de las tres guerras cubanas de independencia. Entre los últimos, estuvieron los condenados por los sucesos de las huelgas y enfrentamientos de la revolución de octubre de 1934, que dejaron un saldo de once muertos y numerosos detenidos y procesados por consejos de guerra en la entonces provincia de Santander. Con su derribo en 1936, los presos pasaron a la nueva Prisión Provincial.
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