Ceruti lleva al máximo su 'guerra' con Igual y se abre a una moción de censura «si Madrid lo autoriza»

Ceruti dio su versión del encuentro que mantuvieron el lunes con Adif. La cita en la que, como contó este periódico, el Administrador de Infraestructuras presentó una modificación sobre su proyecto original. Resumido, que una parte de la losa para cubrir las vías tendría una altura inferior en la parte de los terrenos liberados próximos a la calle Castilla. Hubo, dijo, «una tensión en la reunión». Pero no con Adif, «dentro del propio Ayuntamiento». «Adif no puso ninguna pega a nuestras aportaciones». O sea, que, según Ceruti, aceptaron su hoja de ruta. La que se basa, primero, en la aprobación del modelo de ciudad que se quiere y la posterior convocatoria de un concurso de ideas con diferentes alternativas sobre el asunto ferrorivario.

«Posteriormente –prosiguió–, y cuando ya había terminado la reunión, el señor Díaz (César Díaz, concejal de Fomento, del PP) manifestó que entendía que el concurso de ideas debía partir de las bases establecidas en el convenio vigente con Adif. Desde Urbanismo le dijimos que no». Ahí está la clave del desacuerdo y Ceruti fue con todo. «El concejal de obras manifestó que había que capar el concurso de ideas y el diseño de modelo de ciudad, ajustándose a un convenio, el peor que hemos tendido con Adif, cuando la intención nuestra no es esa y cuando en el pacto de Gobierno consta expresamente que se paralizará cualquier actuación hasta que se decida qué tenemos que hacer». Dijo que «cuando se hacen mal las cosas, las consecuencias se mantienen mal durante más de un siglo» y que, cada vez que escucha «que hay urgencia», se pregunta «dónde estaba en los últimos treinta años en este ayuntamiento gobernado por el mismo partido».

Y dejó una frase que le tocó recordar para evitar equívocos: «Salvo que nos echen, va a haber un modelo de ciudad e, inmediatamente, se va a convocar el concurso. Después hablaremos con Adif en función de los intereses de la ciudad, no de Adif, que ayer no estuvieron defendidos por un miembro del Ayuntamiento».

Al ver que el discurso se encendía, a Ceruti le volvieron a preguntar por una moción de censura. Fue ahí donde insistió: «No he dicho si les echamos, sino si nos echan». Eso no impidió que expresara con nitidez lo que piensa de una moción. Que no tiene el visto bueno de Madrid para romper el pacto, pero que, si le dejaran votar en una moción de censura, él estaría por la labor.

A Igual, otra vez, le tocó echar agua al fuego. Eso sí, frente a la frase de que «la redacción del proyecto está paralizada» del edil naranja, la alcaldesa manifestó que el proyecto «no está paralizado, sino que se está trabajando». Igual recordó que la obra no depende solo del Ayuntamiento, sino que hay más administraciones implicadas, incluidos los gobiernos central y regional, y subrayó que lo primero que abordaron todas las partes fue la necesidad de «conocer la línea roja, dónde, por temas estrictos ferroviarios es posible o no es posible, además de reconocer toda la documentación que ya tenemos, porque no estamos partiendo de cero». «Somos tres y no estamos empezando ahora».

Las posturas encontradas entre PP y Cs no son, dijo, «algo malo», sino «constructivo». Y preguntada si se plantea «echar» a su socio del Gobierno, lo negó. «Javier Ceruti jamás se ha presentado en mi despacho a decir que va a romper el pacto; yo jamás me he presentado en el suyo a decir que voy a romper el pacto, jamás me he planteado echar a Ceruti. En este momento no hay ninguna razón por parte mía (y si la hay por la otra parte que me la diga) para romper. Hay muchas razones para seguir trabajando por los santanderinos, dar estabilidad y seguir en la senda de ayudarlos».