La Clínica Cotero de Menéndez Pelayo se reconvertirá en cinco viviendas de lujo

El edificio de la Clínica Cotero del paseo de Menéndez Pelayo, también denominado Instituto Cántabro de Oftalmología, tiene una llamativa estructura con tejado a dos aguas y amplios ventanales al frente. Tiene dos plantas de altura -a parte de la 0- y cuatro de sótano. Todas en su día estaban destinadas a servicios sanitarios menos la última, que era un aparcamiento. Anteriormente había sido sede del colegio Deogracias.

De momento, se desconoce qué parte del inmueble se reutilizará para el nuevo edificio de viviendas y cual no, o si se derribará por completo para levantar el nuevo. Debido a un contrato de confidencialidad, las empresas que están desarrollando las intervenciones no pueden ofrecer detalles.

Esta nueva promoción de viviendas se suma a otras tantas que se están construyendo en Menéndez Pelayo en los últimos años. De hecho, ahora mismo se está levantando un edificio que contará con once viviendas cerca de la rotonda del Alto Miranda; se está reconvirtiendo una casona en pisos de lujo -en el número 79- y está a la venta otro edificio histórico por más de un millón de euros. Además, está en venta el hotel Royal Suite Santander, pero ya no como establecimiento hostelero sino reconvertido en cuatro apartamentos.

Uno de los principales reclamos de la zona -según vecinos y propietarios de negocios hoteleros- es que, a pesar de estar al lado del centro, es tranquila y el ruido es prácticamente inexistente durante la noche. Atractivos que hacen que los constructores se interesen por la zona y edifiquen cada vez más viviendas y hoteles en esta avenida de alrededor de un kilómetro de largo.

La Clínica Cotero se construyó en 1994 y estuvo operativa hasta junio de 2016. Más de dos décadas de operaciones oftalmológicas que se llevó por delante la crisis económica, aunque sus propietarios conservaron -y siguen atendiendo allí- su centro del Paseo de Pereda. Durante muchos años, la clínica estuvo a la altura de otras instituciones de prestigio como el Instituto Oftalmológico Fernández-Vega, en Asturias. Su fundador, José Norberto Fernández del Cotero, continuó su trayectoria en la consulta original junto al oftalmólogo Ramy Abdin Lahoz y los servicios que se desarrollaban en la planta superior del edificio (reproducción asistida, ginecología, dermatología y urología) se trasladaron al centro de consultas médicas situado junto a Mompía.

La hija de José Norberto representa ya la cuarta generación de oftalmólogos de la familia Fernández del Cotero, una saga que inició su bisabuelo allá por 1885.