
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«Venía a buscar a mi mujer, pero entonces se me ha parado el motor y cuando tenía el móvil en la oreja para llamar al seguro, un vecino me ha dicho que estaba saliendo mucho humo del capó». Son las palabras de C. R., el conductor que este mediodía circulaba por la calle General Dávila de Santander, cerca del hospital Santa Clotilde, cuando su coche, un Citröen, ha comenzado a arder.
Su experiencia al volante le hizo, en primer lugar, orillarse hacia la derecha para no entorpecer el tráfico en la zona y llamar a asistencia en carretera para que una grúa se acercara hasta allí, pero no le dio tiempo. Cuando estaba hablando con el agente, un paisano se le acercó a la ventana y le señaló el capó, por donde comenzaba a salir humo. De ahí fue a peor, explosiones y fuego. Por lo que abandonó el vehículo y pasó directamente a llamar al 112, que envió una dotación de bomberos de Santander.
El suceso ha provocado una gran expectación y revuelo en la zona, con numerosos vecinos que no han dudado en grabar las llamas e interesarse por lo ocurrido.
«Mi coche tenía ya muchos años, ya lo tenía amortizado, la pena es el coche de al lado. Lo siento mucho, pero no he podido hacer nada, ha sido un accidente», contaba el conductor a este periódico.
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Ana del Castillo
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